No es habitual que suceda. El mundo taurino no esconde su animadversión a todo aquello que no es tradicional. Rara vez se ha conocido algún torero que, evidenciando sus derechos constitucionales, ha dado un paso al frente anunciando que es homosexual. El apoyo al colectivo es poco habitual en un ambiente, para algunos hostil, que limita las libertades sexuales de quienes lo componen.
Pero todos siguen arraigados al pasado. El torero Posada de Maravillas ha hecho historia al brindar un toro al periodista David Enguita, amenazado recientemente por su orientación sexual, durante la corrida celebrada el pasado fin de semana en Las Rozas. Muy sensibilizado con lo sucedido, declaró que: «Es importante que los gays también se unan a la afición».
Este paso hacia adelante nos sirve para recordar otros casos de deportistas que también han salido del armario y han demostrado tener una gran sensibilidad con el colectivo.
Javier Raya, patinador olímpico, aprovechó las redes sociales para dejarse fotografiar junto a su novio en una actitud muy cariñosa. Recibió numerosas críticas de haters pero también un gran número de felicitaciones.