Belén Esteban cree que su palabra es ley. Así las cosas, si durante dieciocho años Andrea Janeiro ha sido el pan que le ha dado de comer, ahora la tertuliana ha decidido que nadie puede hablar de la niña de sus ojos. Ante esto, Jesulín se planta. Tiene claro que se expresará sobre lo que considere oportuno y que no será la de Paracuellos quien le impida hacerlo sobre su hija.
Así no, Belén

Jesulín de Ubrique calienta motores en el que será su enésimo regreso a los toros. El asunto está dando que hablar por el video con que el diestro anuncia su rentré. Y lo que tendría que ser una circunstancia feliz se ve empañada por Belén Esteban, que se alza como la gran defensora de Andrea Janeiro prohibiendo a su padre hablar de ella. El asunto ha hecho que salga a relucir como la rubia maneja el embudo de la vida, la parte ancha para ella y la estrecha para los demás.
Si algo tiene claro Jesús es que su ex no es la más adecuada para mandar a callar en cuestiones referidas a su hija. Y menos cuando durante dieciocho años ha hecho de Andrea Janeiro su forma de vida. De hecho, tanta exposición materna sobre la niña cuando era menor de edad llevó a bastantes personas a solicitar la intermediación del Defensor del Menor. Como siempre, la tertuliana echó mano de un recurso seguro, las lágrimas.
Ambiciones, el castillo del conde Drácula

Belén Esteban enganchó a la audiencia en su debut hablando de los Janeiro. Presentó Ambiciones como el castillo del terror y a sus habitantes como los malos de la película. Y aquí empezó su estrella televisiva. Su discurso levantaba audiencias millonarias. En aquellos días se presentaba como madre coraje de una niña llamada Andrea de la que hemos conocido todas sus circunstancias siendo menor de edad.
La colaboradora no ha dudado en entrar a matar en todos los temas relacionados con su hija. Ella misma reveló que María José Campanario quería llevar a Andrea a un dietista para corregir sus hábitos alimenticios. Belén la acusó de propagar que su hija tenía exceso de peso y cerró el tema al grito de ”¿Qué le pasa a mi hija? ¿Que se come seis almóndigas más grandes que mi cabeza?”.
El maná se llama Andrea Janeiro

Sobre su hija y Ambiciones, Belén ha contado la situación por capítulos. Reveló que Andrea la telefoneó para pedir que fuera a recogerla durante unas vacaciones que pasaba con su padre. Otra vez el foco puesto sobre la menor por obra y gracia de esta madre coraje que ha sido una de las estrellas de la televisión mejor pagadas de su época. Ahora ya no porque cotiza a la baja. Tampoco da el share de antaño y eso la ha relegado a la medianoche en el Deluxe.
Paradojas de la vida, ha sido Andrea Janeiro quien ha matado a su madre, mediáticamente hablando. Al cumplir los dieciocho, le dijo a Belén que ella no tenía por qué pagar por la forma que había escogido para ganarse la vida y le dejó muy claro que no quería que volviera a hablar de ella. Y es aquí cuando a la Esteban no le quedó más remedio que bajarse del carro de Andreíta.
Las incoherencias de Belén

De exhibir a su hija hablando de ella en los medios, la Esteban ha pasado a convertirse en defensora de su privacidad. Y es que Belén cree que el juego lo maneja ella y que su palabra es ley. De ahí que se exalte en Sálvame pidiendo de forma exacerbada que no se mencione a Andrea. El mismo mensaje lanza al resto de medios de comunicación recordando que la niña de sus ojos envió un comunicado donde manifestaba su deseo de anonimato.
En este punto, los periodistas lo tienen claro. Informarán sobre Andrea cuando ocurra algún hecho noticiable. Que sea objeto de titulares depende únicamente de ella y de su madre, que estos días no para de hablar de su hija y pretende que no se la mencione en plan ordeno y mando. Increíble resulta contemplar como en Sálvame nadie le enmienda la plana ante semejante incoherencia.
Y Andrea le cortó las alas…

El comunicado que envió Andrea Janeiro a los medios llamó poderosamente la atención porque anunciaba que tomaría medidas legales en caso de no respetarse su deseo de anonimato. Sorprendente porque quien la ha puesto en el disparadero y ha fomentado el interés por su vida ha sido su madre. Entonces, ¿por qué amenaza con demandas a periodistas en vez de pedir cuentas a Belén Esteban?
En opinión de muchos, Andreíta ha heredado ese punto de soberbia que caracteriza a Belén Esteban. Ambas creen que tienen la patria potestad para encender el ventilador y apagarlo. Pero, no, esto no funciona así. No se pueden borrar de un plumazo dieciocho años de exposición mediática en los que Belén Esteban ha radiado en directo la vida de Andrea Janeiro. Por tanto, que ahora no vengan con mordazas la madre y la hija. Que cada palo aguante su vela.
Jesulín se planta con su ex

Y mientras Belén Esteban sigue imponiendo la ley del silencio sobre Andrea en Sálvame, Jesulín de Ubrique se planta. Ha decidido que su vuelta a los ruedos tendrá mucha proyección mediática. Está dispuesto a hablar de todo y, por supuesto, no tiene para nada en cuenta las prohibiciones de su ex dado como se ha producido durante todos estos años. ¿Modelo de imperfección? Y, ojo, porque el diestro tiene mucha paciencia, pero cuando se le acaba, no duda en tirar de la manta.
Según cuentan a Cotilleo, la frase que mejor resume las intenciones de Jesús sobre Belén es: “Perdona, bonita, pero ahora hablo yo”. El diestro ya está harto de amenazas y quiere pasar a la acción. Al fin y al cabo nadie puede privarle de su derecho a contar la historia como la ha vivido él. Será interesante escuchar su testimonio. Y, mientras tanto, como telón de fondo se escucha a Jesulín al grito de “Belén, frena, Andreíta también es mi nena”.
Andrea Janeiro cumplió diecinueve años la pasada semana. Con su mayoría de edad, ya anunció su negativa a participar en el mundo de la televisión. Se la ha respetado. Y mucho. O eso pensamos nosotros.
Belén Esteban lo ha vuelto a hacer. Ha pedido a los medios que no nombren a su hija, que ya ha demostrado que lo mediático no le interesa. También hace un llamamiento a Jesulín de Ubrique, quién podría haber anunciado sus intenciones de que Andrea forme parte de su vuelta a los ruedos. A todo esto… ¿dónde está Andrea Janeiro? te lo contamos.
Protegida por Belén Esteban

Hoy lo ha vuelto a hacer. Belén Esteban ha vuelto a hablar en Sálvame sobre su hija. Lo ha hecho para hacer, por cuarta vez, un llamamiento a los medios de comunicación. Ha pedido que no se nombre a Andrea Janeiro, ya que ella ha demostrado que no quiere participar en esto. También se lo ha pedido a Jesulín de Ubrique, que ha sido el primero en filtrar la idea de que su hija le acompañe en su vuelta a los ruedos.
Desde que Andrea Janeiro cumpliese la mayoría de edad, Belén Esteban ha protegido como ha podido el anonimato de su hija. Ella siempre ha aceptado que su madre se dedique a la televisión y sabe que tanto ella como su padre, Jesulín de Ubrique, son dos rostros muy populares en nuestro país.
Estamos seguros de que si la hija de la colaboradora pudiese cambiar algo, sería que su madre no hubiese trabajado en televisión. ¿Tomará Belén a medio/largo plazo alguna decisión para iniciar una nueva vida?
Así es el sitio donde estudia en Birmingham

El pasado año se marchó a Birmingham (Inglaterra) para continuar con su formación como estudiante. Allí ha podido estar tranquila y sin la presión de los fotógrafos que la siguen o la esperan a la puerta de su casa. Son escasas las ocasiones en las que hemos visto a la hija de Belén Esteban aparecer en televisión.
Mucho que ver tiene la universidad en la que estudia, el Birminghan Metropolitan College, que cuenta con casi 23.000 estudiantes. Allí tiene todo lo que necesita y es considerado el centro con más prestigio y mejor fama de la ciudad. Birminghan es la ciudad más joven de Europa, y casi la mitad de su población tiene menos de veinticinco años. Pero no todo va a ser estudiar. La ciudad cuenta con numerosos restaurantes, un entretenimiento de calidad y tiendas de primer nivel. Andrea Janeiro podrá ir de compras a su gusto y sin que nadie la moleste.
Su sueño en un futuro cercano es convertirse en locutora de radio, y quiere ser reconocida exclusivamente por su trabajo y no por ser hija de quién es.
Daniel Wozza: el principal motivo por el que Andrea se fue a Inglaterra

Uno de los motivos -y el más importante- por el que Andreita eligió Inglaterra como destino, tiene nombre y apellidos: Daniel Wozza Worrall.
Tiene veintiún años y nació en Birmingham. Conoció a Andrea Janeiro cuando este viajó con sus amigos a Benidorm. Allí se encontró con Belén y su hija, que son muy habituales en la localidad alicantina. A pesar de haber mantenido esta relación oculta durante casi dos años, el joven lo acabó confirmando en su cuenta personal de Facebook. Incluso no tuvo reparo en publicar algunas instantáneas con Andrea en las que salían besándose.
Actualmente, el «yerno» de Belén Esteban, reside cerca de Birminghan. Cerca de Andrea. Algunos dicen que se parece a Justin Bieber. Y no olvidemos que el cantante es el ídolo de la hija de Jesulín. Ese pudo ser uno de los motivos por que decidiese empezar a conocerle.
Andrea Janeiro no quiere ser famosa y va por buen camino

Andrea no quiere dedicarse a la televisión. Eso ya lo saben hasta en la Antártida. Cuando cumplió dieciocho años fueron numerosas las críticas que recibió relacionadas con su físico, incluso hubo burlas por parte de muchos internautas. Andrea Janeiro no entró al trapo en ningún momento y dio un paso más allá. Mandó un comunicado para pedir a la prensa que respetaran su decisión de mantenerse ajena a los medios de comunicación.
“Con motivo de la presión mediática a la que me estoy viendo sometida quiero pedir públicamente a los medios que pongan fin a dicha situación y a la vulneración de mis derechos al honor, a la intimidad y a la propia imagen”. Podemos decir, que pasado casi un año desde que se hiciera público este mensaje, la decisión de Andrea se ha respetado, y mucho, por parte de la prensa del corazón. Ha conseguido lo que tanto quería: no ser un personaje público ni participar en el mundo de la televisión.
La relación de Andrea con sus padres, Jesulín y Belén

Andrea Janeiro se hizo famosa desde el momento en el que nació, incluso antes. Con su madre, Belén Esteban, mantiene una magnífica relación. Ella siempre ha hecho de madre y de padre, debido a las continuas ausencias de Jesulín de Ubrique.
Con Belén comparte todo: confesiones, conversaciones, conciertos y todo lo normal entre madre e hija. Con su padre, sin embargo, no se puede decir lo mismo. Apenas hay fotos de los dos, y con eso ya lo decimos prácticamente todo.
Se ha perdido muchos momentos de la vida de su hija. Incluso Belén llegó a afirmar que muchas veces no ha felicitado a su hija Andrea por su cumpleaños porque se le había olvidado. En la actualidad las cosas podrían ser diferentes. Según han contado hoy en el Programa del Verano, Jesulín habría felicitado por su reciente cumpleaños a Andreita. De paso, le habría propuesto ir y formar parte, junto a sus otros hijos, de su vuelta a los ruedos en el próximo mes de agosto.
Belén Esteban ha tenido que reinventarse después que su hija le cortara las alas mediáticas. Y es que Andrea Janeiro le dejó muy clarito que no quería que la mencionara en televisión al grito de “Yo no tengo que pagar por la vida que tú has llevado”. Esto también incluía el silencio sobre Jesulín. ¿Cómo ha afectado esto a la colaboradora de Sálvame? Te lo contamos todo a continuación.
El castillo del conde Drácula

Andrea Janeiro fue la niña más mediática de España por obra y gracia de su madre. Durante años, Belén Esteban no paró de hablar de su hija en los platós. La percha de este derroche verbal era siempre la poca atención que Andrea recibía de su padre así como los supuestos feos de María José Campanario. Parecía que Ambiciones era el castillo del conde Drácula.
A ritmo de “Por mi hija, mato”, la Esteban apuntalaba su fama de fenómeno mediático. Todo esto dio origen a que el Defensor del Menor decidiera actuar de oficio para proteger a Andrea Janeiro, que entonces tenía 10 años. También aclararon que habían recibido muchas denuncias de particulares que solicitaban se protegiera a la niña.
El Defensor del Menor interviene

La oficina del Defensor del Menor alegó que no era de recibo que las circunstancias de Andrea Janeiro fueran televisadas un día sí y otro también. Señalaban que no podía ser que una niña fuera contenido de un programa de televisión donde se hablaba constantemente de si su padre la visitaba, si estaba debidamente atendida económicamente por Jesulín y otros asuntos que deberían permanecer en el ámbito de lo privado.
Como era de esperar, la intervención del Defensor del Menor en la vida de Belén Esteban se convirtió en asunto mediático. La colaboradora se sentó en el Deluxe para explicar que estaba muy afectada por lo sucedido. Desencajada y llorando a lágrima viva, la rubia clamó venganza contra esas personas que la habían denunciado. “¡Ni que fuera yo Bin Laden!
Andrea frena a Belén

Cuando Andrea Janeiro cumplió los dieciocho se plantó. Afirmó que quería permanecer en el anonimato dado lo mucho que le había perjudicado la fama de su madre: “Yo no tengo que pagar por lo que tú hayas hecho”, le espetó la joven a Belén Esteban. Curioso que haya sido su hija quien ha parado los pies a la de Paracuellos, que, durante años, ha vivido de sus circunstancias familiares.
Belén descubrió que las críticas hacia Jesulín eran un maná económico caído del cielo. A partir de ese momento convirtió en profesión radiar su vida en directo. Eran los tiempos en que los Belenazos se utilizaban para remontar audiencias. Indudable que la Esteban entonces era irresistible para los telespectadores, que se quedaban enganchados a la pantalla viéndola llorar por haber tenido que sacar sola a su hija adelante o por los desplantes que le hacían los Janeiro.
El declive de la Esteban

Cuando Andrea llamó al orden a su madre, prohibiéndola que la mencionara en los medios, así como recordándole que no era de su agrado que hablara de su padre, Belén tuvo que reinventarse. Fue entonces cuando empezó su declive mediático. De hecho, la rubia se jactaba de que no iba a las reuniones de Sálvame, las que se celebran previamente a la emisión del programa y donde se repasan los temas que van a tratarse, porque ella era el contenido.
La Esteban intentó remontar el vuelo cuando denunció a Toño Sanchís. Sin embargo, el tema no interesó por más que lo promocionaron en Sálvame. De ocupar las primeras sillas, pasó a la medianoche dado que ya no daba audiencia. Sin duda, todo un golpe para ella, que siempre se jactó de romper los audímetros.
Exclusivas absurdas

Es Belén Esteban una mujer con suerte, de otro modo no se entiende que le paguen por protagonizar exclusivas absurdas, como la que concedió explicando que le habían puesto una bomba de insulina. Por supuesto, también relató para el papel cuché las aventuras y desventuras con Toño Sanchís, un asunto que judicialmente se ha saldado a su favor. El manager debe pagar a su ex representada la cantidad de 600.000 euros.
Tampoco puede ya la Esteban seguir estirando el chicle mediático de Toño, pues la ha demandado por atentar contra su honor tras recopilar todas las andanadas verbales que ha lanzado contra él. Está por ver si el juez le da la razón. De momento, la cuestión ha servido para que el tema no vuelva a tocarse en Sálvame.
Se pasaron con el photoshop

Esta semana Belén protagoniza la portada de Lecturas con un impactante titular: “He perdido ocho kilos”. Se habla de la nueva Belén, que posa al más puro estilo Ana Obregón, metiendo tripa. A alguien se le ha ido la mano con los retoques fotográficos porque tal y como puede verse en Sálvame, la Esteban tiene barriga. Sin embargo, en la revista aparece lisa como una tabla, como si hiciera cien abdominales al día.
Ciertamente, el reportaje de la rubia ha levantado muchas críticas, pues nada tiene que ver con su realidad. Llama poderosamente la atención su cara, piel perfecta, hidratada, luminosa… Algo que no se aprecia en sus apariciones en televisión, donde su rostro se muestra apagado y pidiendo a gritos un chute de vitaminas.
Vetando a Fran

Hace tiempo que Belén habla de boda con el Migue. Sin embargo, la misma no llega. Todo indica que el conductor de ambulancia no está por la labor de pasar por la vicaría. Mientras tanto, se deja fotografiar al lado de su amada, ya no tiene miedo a los flashes y parece cómodo por la atención que despierta. Eso sí, de momento no tiene intención de saltar al ruedo. Mejor que no lo haga, pues como a su novia se le gire la pestaña, lo condena al ostracismo.
Fran Álvarez tenía intención de ir a Supervivientes. Sin embargo, Belén, confesado por ella misma, le vetó: “Hablé con quien tenía que hablar”, dijo la rubia. El asunto es que el camarero se quedó en tierra. Su ex no quiere que hable sobre ciertos temas ni que le robe el protagonismo mediático. Así soy yo, que canta DJ Kiko.