Sara Carbonero llamó siempre la atención al ser elevada a presentadora y reportera de deportes con una rapidez pasmosa. Con talento, después de conocerse su relación con Iker Casillas con el famoso beso del mundial de Sudáfrica 2010, muchos se interesaron por su historia profesional. Y he aquí lo que nadie se esperaba: aunque trabajaba como periodista no había terminado la carrera. Una asignatura maldita, sin embargo, no ha conseguido apartarla de su profesión. Ahora, después de unos años muy difíciles tras la salida de Iker del Madrid al Oporto y los diversos problemas de salud de uno y otra, Sara Carbonero afronta una nueva etapa en su vida, ya en Madrid. Y hay quien dice que podría volver a la universidad y cumplir con su asignatura pendiente.
EL BESO QUE LO CAMBIÓ TODO
Desde hacía unos meses, Sara Carbonero había sido el rostro visible de Deportes Telecinco. Sus ojos verdes y su piel morena, junto con su particular estilo, la habían catapultado como una de las más deseadas. Lo que por entonces nadie sabía en aquellos meses de 2010, es que el corazón de la periodista estaba ya ocupado. Fue él quien lo hizo público con una de las escenas más románticas e históricas de nuestro deporte. Ella, reportera, le hace a él la entrevista como capitán de la selección después de ganar la primera copa del mundo para el combinado español. La emoción de ambos es evidente… pero él sorprende a todos, ella incluida, con un beso muy romántico que se convirtió en viral. Iker y Sara, la pareja perfecta.
