Mientras Feliciano López prepara su visita a Bertín Osborne, donde seguramente dejará alguna perla entre líneas, su ex, Alba Carrillo, parece que se ha quedado soltera y sin compromiso. No sabemos qué tipo de relación tenía la modelo con David Vallespín, pero en una entrevista en el ‘Deluxe’ ya ella ya dejó claro que tampoco lo veía demasiado claro: «Me esperan fuera, pero sé que voy a un programa y voy a conocer gente. Cuando salga tendremos que hablar y ver qué pasa. Tiene los mismos años que yo, 30 (…) Por las noches me agarraré a alguien… No te prometo nada. Ahora la libido la tengo bien… No lo sé, ya no puedo decir de esa agua no beberé». Por ahora no bebe agua, solo colecciona broncas mientras Gloria Camila y su novio estrenan el «chubasqueroning». El ingeniero aeronáutico con el que compartía vida dicen, Antonio David Flores concretamente, que ya la ha olvidado porque se avergüenza de sus broncas. Debía estar miope el cartagenero residente en Las Rozas, viendo el percal familiar de su hasta ahora novia.
Alba por su parte sigue viviendo el romance, como aquellos japoneses que esperaron en la jungla el final de la II Guerra Mundial tras décadas de paz. «Hablamos de libros y cosas así. Nunca había hablado de libros…» decía sin cortarse, quizás acostumbrada a las charlas deportivas de Fonsi y Feliciano, que solo tienen pinta de leer el Marca, a lo Rajoy. Sandra Barneda, atónita ante la ruptura a distancia, cargó contra el ingeniero: «Si el novio de Alba Carrillo la deja y te enteras tú, muy mal por el novio, muy poco novio es». Antonio David sostiene que «David quiere que se sepa porque no está muy contento con la actuación de Alba en el programa», según Flores. Isabel Rábago especuló con conveniencias y egos:»A lo mejor nunca han sido novios y le ha utilizado para salir en la portada de ¡Hola!». Nagore Robles, sin cortarse, dijo que esa actitud sería la de «un novio de mierda». ¿Era un novio de mierda o el citado señor quería salir en los papeles hasta que advierte que saldrá, pero quizás en los de sucesos? No lo sabemos, pero claro está que Alba Carrillo va camino de convertirse en la famosa del año, quizás mercancía con la que poblar ‘Sálvame’.
Y eso que hasta ahora sus pasos televisivos siempre habían sido discretos: en ‘Hable con ellas’, a excepción de algunas broncas puntuales, siempre se mantuvo en segundo plano. Y en ‘Amigas y conocidas’ se mostró simpática, granjeándose la simpatía de sus defensoras: la incombustible Loles León y la recordada Paloma Gómez Borrero. Pero ahora la modelo está en boga, despertando un morbo inusual digno de protagonizar junto a su singular madre un reality-show tipo ‘Las Campos’. Porque esa vida, esas salidas de tono, esos nervios constantes, dan para mucho. Y si no que se lo digan a Telecinco, consciente del juego de madre e hija, situación que contrasta con los bostezos que provoca Bigote Arrocet, haciéndose de oro mientras adelgaza bajo el sol.
