La que fuera colaboradora de Sálvame no ha tenido pelos en la lengua a la hora de hablar abiertamente sobre su vida íntima. Rosa Benito ha revelado algunas de sus prácticas sexuales y, por lo que cuenta, parece que todavía conserva su libido, a pesar de sus más de sesenta años. ¿Quieres saber cómo se las gasta la tertuliana en la cama? Sigue leyendo para descubrirlo, porque sus declaraciones no tienen desperdicio.
Rosa Benito se desnuda en cuerpo y alma
Ya conocemos casi todos los aspectos de la vida privada de Rosa Benito. La cuñada de Rocío Jurado ha pasado una larga época de su vida en los platós de televisión, hablando sobre sus intimidades y las de su familia. La presión mediática terminó ahogando a la peluquera de la más grande y decidió retirarse por un tiempo de la televisión, aunque ahora ha vuelto con más fuerza que nunca.
Lo ha hecho en Ven a cenar conmigo: Gourment Edition, el reality show de Cuatro del que se ha proclamado ferviente ganadora. Durante las veladas que compartió con otras celebridades de la talla de Loles León, Irma Soriano y Belinda Washington, Rosa se abrió en canal y habló de sexo sin tapujos ante las cámaras del programa. Benito no tuvo pelos en la lengua a la hora de reveló algunos aspectos sobre su intimidad. Lo cierto es que los más jóvenes no tienen nada que envidiarle.
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La cuñada de Rocío Jurado, como una ola
Benito alucinaba escuchando hablar a Loles León sobre orgías y camas redondas. La conversación derivó al tema de los multiorgasmos, algo de que lo que Rosa todavía tiene mucho que aprender. «¿Pero eso qué es?», preguntó la tertuliana. Cuando se lo explicaron, ella aclaró que prefería un orgasmo largo e intenso que muchos cortos y seguidos. «Yo uno y muy bien, pero ya», sentenció. Para terminar la divertida velada, la cuñada de Rocío Jurado jugó y exploró con diferentes juguetes sexuales… ¿Se animaría a comprar alguno cuando las cámaras se marcharon?
Pero esta no es la primera vez que Rosa habla tan abiertamente de sexo. Benito ya confesó en Gran Hermano VIP que no pudo controlar su pasión a bordo de un avión y masturbó en pleno vuelo al que por aquel entonces era su marido, Amador Mohedano. Está claro que la tertuliana es pura lujuria y que no tiene reparos a la hora de airear sus prácticas sexuales más eróticas. ¡Claro que sí, fuera tabúes!
