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Ortega Cano, tan a gustito en el cumpleaños del padre Ángel 

El carismático Padre Ángel, conocido por su labor humanitaria y su compromiso con los más necesitados, ha celebrado su 87º cumpleaños de una manera especial: organizando un concierto benéfico en la histórica Iglesia de San Antón. No faltó su amigo José Ortega Cano que recordó sus mejores momentos con un micrófono en la mano y aquel «estamos tan a gustito» en la boda de Rocío Carrasco y Antonio David Flores en un tono achispado que acabó siendo la comidilla de toda España durante años.

Fueron tres minutos donde el diestro tomó las riendas de la boda y se ganó la fama de aficionado a la bebida, algo que se corroboró años después cuando provocó un accidente que le costó la vida a una persona con una tasa de alcohol más elevada de la permitida y que casi le cuesta la cárcel. La velada, que reunió a numerosos rostros conocidos, fue amenizada por la talentosa cantante Glenda Gaby.

 

El evento, que ya se ha convertido en una tradición anual, contó con la presencia de destacadas personalidades, entre ellas el famoso torero José Ortega Cano. Acompañado por su hija Gloria Camila, su hermana Mari Carmen, su cuñado Aniceto y su confidente Marina, Ortega Cano no quiso perderse la oportunidad de celebrar junto al Padre Ángel. 

Ortega Cano

A pesar de la multitud que llenaba la iglesia, el torero demostró su espíritu festivo al dejarse llevar por la música. Con pasos de baile y movimientos taurinos, brindó un toro imaginario al público mientras sonaba la canción ‘Se me olvidó otra vez’ de Juan Gabriel. El carisma y la energía de Ortega Cano lo convirtieron en uno de los grandes protagonistas de la noche. 

 

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Ortega Cano y Glenda Gaby

Ortega Cano

La cantante Glenda Gaby, encargada de amenizar la velada, compartió el escenario con el torero, creando un momento emotivo y lleno de sentimiento. A pesar de la intensidad del momento, Ortega Cano no se despojó de sus gafas de sol, cerrando la canción con un solo improvisado que fue aplaudido por todos los presentes. 

En un gesto que refleja su compromiso con los demás, el Padre Ángel destinó los fondos recaudados durante el concierto a obras benéficas locales. Sin duda, una noche inolvidable en la que la música, la solidaridad y la alegría se unieron para celebrar la vida y la generosidad del querido sacerdote. 

 

«Es un placer estar aquí en este monumento, con esa magia que tiene el padre Ángel y que tienen todos ustedes, la verdad, es una maravilla. Déjame decir que yo nací en Cartagena, en el barrio de San Antón, o sea, soy san antonero. Viva, viva el padre Ángel, vivan todos ustedes» ha exclamado un Ortega Cano que, aclamado y sintiéndose a gusto, se ha quitado las gafas para unirse a la artista en la canción ‘El Rey’ y ‘Quizás, quizás, quizás’. 

Espalda