El momento de estrellato de Beatriz Luengo
Beatriz Luengo ha protagonizado unos momentos sumamente significativos en su paso por el pódcast de Laura Escanes, ‘Entre el cielo y las nubes’. En la conversación la cantante se ha atrevido a afrontar diversos temas. El que más atención ha conseguido es su opinión en torno a la sexualización en el mundo de la música. Y lo hace contando una experiencia que la cambió para siempre.
«Estaba en una sesión para una artista femenina y estaba componiendo: ‘Quiero que me riegues con tu manguera toda la noche entera’», le cuenta Beatriz Luengo a Escanes. Y entonces dice que ella mismo reaccionó ante la letra. «Yo les decía: ‘Por qué si estamos componiendo para una artista femenina que va a hablar de sexualidad, ¿no hablamos de algo que le dé placer a la mujer?’»
El placer y el machismo
Basta asomarse un momento a las letras de Beatriz Luengo para entender a qué se refiere. Siempre en sus canciones se habla del deseo masculino. «¿No os dais cuenta de que es una sexualidad que siempre le da placer al hombre?», plantea con cierto asombro. Pero a partir de ese momento intentó cambiarlo, para tratar de ofrecer algo distinto y poner su granito de arena en el ámbito.
Sin embargo, los cambios no son fáciles. Cuenta Luengo: «Era muy difícil para mí cambiar el sistema de composición y empecé a crear contestaciones a canciones y esto fue un tema que me trajo mucha viralidad y hate». Al tomar esta decisión Beatriz Luengo se puso en contra a muchos seguidores a los que les molesta que sus artistas cuestionen la fórmula impuesta por el sistema patriarcal.
La acusación más dolorosa para Beatriz Luengo
Al igual que tuvo esa experiencia hubo otros sucesos que marcaron tremendamente la vida y las decisiones de Luengo en torno a su carrera, y así lo compartió con la influencer Laura Escanes. Una de las acusaciones que más la han hecho sufrir es el cuestionamiento de que no escribe sus propias canciones, algo que suele ocurrirles a las mujeres que cantan pero que jamás les sucede a los hombres.
Dice Beatriz Luengo que lloró al escuchar el famoso discurso de Aitana y que se sintió muy identificada con lo que contó. «Yo empecé escribiendo canciones con un pseudónimo masculino porque cuando pedían canciones para hombres les parecía que si lo escribía una mujer se quedaba suavecita, se sentían canciones que no les hacían lo suficientemente masculinos», concluye.
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