Sara Carbonero habla de su momento más negro

Sara Carbonero

Sara Carbonero cuenta sin filtros impactante recuperación

Sara Carbonero ha publicado una fotografía con la que quiere rememorar el tiempo que ha pasado tratando de superar una enfermedad devastadora que por suerte ha quedado atrás: «Lejos de la frivolidad que pueda parecer, yo cuando me miro al espejo, lo hago para tomar conciencia de mi misma. Lo utilizo como herramienta clave para mejorar mi autoestima», confiesa.

La periodista ha celebrado hace unos días que ya no tiene que ponerse pelo falso y que por fin ha regresado su anhelada melena, una situación por la que pasan muchas personas afectadas por el cáncer después del tratamiento de la quimioterapia, los cambios físicos que tiene que afrontar los enfermos a veces son los que provocan las mayores secuelas psicológicas.

Sara Carbonero habla de su momento más negro

Sara Carbonero afronta esta nueva etapa de su vida con ilusión

Sara Carbonero se ha reconciliado con los espejos porque ha confesado que durante el tratamiento huía de ellos porque no reconocía a la persona que mostraba el espejo: «Llegué incluso a pasar tres o cuatro meses sin mirarme a ninguno», declara la periodista sobre un tema en el que se reconocerán muchas otras mujeres.

La periodista también ha contado cómo afectó la enfermedad a su hijo Martín cuando tan solo tenía 5 años, cuando ella estaba en el último ciclo de la quimioterapia el niño se tumbó a su lado y le dijo: «Mamá, es que tienes las cejas grises y no pareces tú», la reportera había perdido sus cejas y le dijo a su hijo que le quedaba una pestaña, pero enseguida comenzaron una guerra de almohadas para que el momento no se convirtiera en algo dramático.

Sara Carbonero habla de la relación con sus hijos y de la valiosas enseñanzas de la enfermedad

Para la ex-mujer de Iker Casillas todo este proceso fue complicado porque sus hijos eran muy pequeños cuando a ella le diagnosticaron cáncer de ovarios, su cambio físico era importante por los efectos de la quimioterapia y los niños sufrieron al ver a su madre con el pelo corto, ella les llevó unos puzles para distraerlos, pero no fue suficiente.

Sara Carbonero cuenta todo el proceso de la enfermedad para superar esa etapa de su vida y para compartir su experiencia con otras personas que están pasando por la misma situación, la mayor dificultad en estos casos tiene que ver con los hijos y con la forma de contarles lo que está sucediendo sin causarles demasiado daño, por suerte para todos, ella está recuperada y afronta esta nueva etapa de su vida con muchas ganas.