A sus 52 años, Susanna Griso se ha convertido, con la ausencia de los platós de Ana Rosa Quintana, la que había ejercido como tal hasta ahora, en la auténtica «reina de las mañanas» en televisión. Su ‘Espejo Público‘, con el que lleva desde 2006, es todo un referente político y le ha hecho ganar prácticamente todos los galardones posibles (dos Ondas, una Antena de Oro, un Premio Joan Ramón Mainat, un Micrófono de Oro y un Nipho). Aunque para muchos todo ello se deba exclusivamente a su profesionalidad y buen hacer ante las cámaras, lo cierto es que la barcelonesa parece tener ayudas ‘extras’.
Curiosidades de la presentadora
Fuera de las cámaras Susanna Griso tiene una vida de lo más normal. La presentadora es la menor de siete hermanos y en 1996 se casó con el también periodista y productor de televisión Carles Torras Dalmau, quien se ha labrado fuera de los platós una carrera exitosa a los mandos de programas como ‘Conexión Samanta’ o ‘Hay una cosa que te quiero decir‘. El matrimonio, que tiene tres hijos, dos de forma natural, Jan y Mireia, ambos en la adolescencia (16 y 14 años), y Dorcette, su hija de origen africano (Costa de Marfil) con la que ha estado ocho años en proceso de adopción hasta que finalmente accedió en 2018, se separó en 2020. Cuando su trabajo se lo permite, Susanna intenta aprovechar el tiempo con todos sus hijos, ya sea yendo a los toros o al cine.
