Demi Moore es la famosa actriz que daba vida a Molly en Ghost. Ella era la protagonista junto a Patrick Swayze. A sus 58 años es madre de tres hijas, fruto de su matrimonio con Bruce Willis: Rumer (33 años) , Scout (30 años) y Tallulah (27 años). Con una belleza natural por excelencia, la hollywoodiense siempre ha mantenido una cruzada contra reloj vs el envejecimiento.
Ella es una actriz más conocida del planeta y si antes tenía una prolífica carrera cinematográfica, ahora está más en un segundo plano cinematográficamente hablando. Pero cada paso que da, es de lo más seguidos… Sus relaciones con chicos más jóvenes como Aston Kutcher, que llegó a ser su marido, con un relación que la dejó por los suelos, por lo liberal que era, y sus operaciones son más que sonadas. Eso, sin olvidar, la mala relación que vivió con sus hijas, especialmente con una de ella.
Los problemas con su hija Tallulah Willis, ¿debido a su obsesión por el cuerpo?
Los problemas con su hija Tallulah Willis han sido de lo más conocidos. La adolescencia de la también hija del actor Bruce Willis, fue cuanto menos traumática ¡Y es que las comparaciones son odiosas!
Desde pequeña le persiguieron las críticas por su físico debido a la belleza de su madre. Con 20 años Tallulah llegó a revelar, tras todas aquellas críticas que durante su adolescencia fue diagnosticada con amorfia corporal. La amorfia corporal esun trastorno psicológico que produce en quienes lo padecen una imagen distorsionada de su cuerpo. A sus 27 años, parece que todo ya está superado. Su padre Burce Willis, también ha sido una persona que ha estado muy pendiente de su físico.
También más que comentada su mala relación al ver a su madre siempre como una eterna Peter Pan. A día de hoy, madre e hija disfrutan de una gran relación.
