La última exclusiva que Carmen Borrego ha ofrecido a Lecturas donde revela su malestar con su sobrina Alejandra Rubio y su hermana Terelu Campos le está pasando factura. Algo que ha servido para avivar rencillas internas entre el clan familiar, algunas de las que ni siquiera, dicen, eran conscientes. Carmen Borrego se refugia en su soledad en esta guerra, ni siquiera los compañeros de Viva la vida confían en sus palabras. Alejandra Rubio solo pide una cosa a su tía, que sea clara y pise fuerte. Así quiere demostrarlo la tertuliana que vuelve a plató para explicar su posición en esta batalla que parece, estar lejos de acabar. Si quieres saber qué es lo que ha dicho frente a las insinuaciones de la joven sigue leyendo, te lo contamos al detalle a continuación.
Carmen Borrego responde a su sobrina: «No estoy bien. No voy de víctima»
> Carmen Borrego no pasa por uno de sus mejores momentos, nadie la comprende y ella no consigue expresar lo que realmente pasa por su cabeza, además odia que la gente se compadezca de ella. «Tengo un sentimiento de pena. No llevo quince días bien. Lo que no quiero dar a entender es que porque uno sienta dolor va de víctima. Yo no voy de víctima de nada». No ha perdido la oportunidad de responder a algo que su sobrina dijo y le chocó: «Cuando vengo a un plató intento pisar fuerte siempre, no me tengo por qué acobardar porque no he hecho nada», asegura. «Con la familia no hay que ser rencorosos ni orgullosos. A mí me da igual. Lo que quiero dejar claro es que yo no sé de lo que se habla». Así, la pequeña de las hijas de María Teresa Campos confirma que no sabe la razón por la que la relación con su sobrina ya no es la misma.
Alejandra no quiere hablar con ella, ni siquiera por teléfono, tampoco lo ha hecho en persona desde que se reencontraron en plató. «Yo he dado los pasos que tenía que dar. La llamo y no me coge el teléfono». Habla con su hermana para comunicárselo, Alejandra prefiere conversar en persona, aunque finalmente el acercamiento no se haya producido. Pronto vendría la verdadera bomba, y es que Carmen asegura no conocer la causa de su distanciamiento. «Prometo que no sé cuál es el detonante. Ella tiene un motivo, pero también tengo absolutamente claro que en ningún momento he sentido tener una mala relación con ella. No he notado un enfriamiento, porque si no, me hubiera preocupado».
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