Omar Montes está en boca de todos. El cantante ha concedido una entrevista a David Broncano, en La resistencia, que ha causado en gran revuelo. Aseguró que tenía una relación estupenda con Isabel Pantoja, pero, esa amistad no fue suficiente para impedir que los secretos de Cantora salieran a la luz. Omar le regaló al humorista una muñeca de porcelana que, supuestamente, había pertenecido a la tonadillera. Su intención era burlarse de la familia, pues el carácter tétrico del juguete, despertó las carcajadas del público.
Sin embargo, Chabelita ha desmentido a su expareja, y asegura que todo ha sido una mentira para ganar repercusión en los medios. En Cotilloe.es hemos descubierto que Omar Montes está muy acostumbrado a difundir bulos para llamar la atención de los periodistas. Y, lo cierto, es que le ha funcionado bastante bien: relaciones falsas, peleas fingidas, o amistades interesadas. Todo vale para que su música no caiga en el olvido. ¿Quieren conocer cuáles son los grandes montajes del artista?
2La pelea que indignó al público: una estrategia de promoción
> Omar Montes consiguió hacerse un hueco en la música gracias a los escándalos que protagonizó en televisión. Y, entre el dinero que le generan sus canciones, y todo lo que ha ganado en los platós de Telecinco, el cantante ha pasado de ser un niño de barrio a un joven millonario. Pero, para conseguirlo, ha hecho varios montajes que han indignado al público. Ana Rosa Quintana fue la primera en descubrir su mentira, y sentenciar su estrategia de promoción: “no todo vale, chico”. Omar Montes lanzó al mercado una canción en plena pandemia y, al temer que no tuviera mucho éxito, fingió una pelea callejera para que la prensa se hiciera eco de su nombre.
Cuando el púbico vio esta pelea, Omar recibió una avalancha de críticas, y decidió borrarse las redes sociales. Al cabo de unos días, hizo su reaparición estelar, e intentó convertirse en víctima del montaje. Según él, la pelea únicamente era una de las escenas de su nuevo videoclip. Pero, al ver que le estaban acosando por el escándalo, tuvo que desaparecer durante un tiempo. El equipo de Ana Rosa descubrió que no estaba contando la verdad, y que todo había sido una estrategia para llamar la atención.
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