Belén Esteban está en el punto de mira de todos los periodistas. La tertuliana de Sálvame no atraviesa por un buen momento económico. Su antiguo representante, Toño Sanchís, la sigue debiendo una alta cantidad de dinero, y los problemas judiciales a los que tiene que hacer frente cada vez son más complicados. Por si fuera poco, la colaboradora, ha tomado una decisión que repercute de forma directa en su economía. Además, Belén Esteban ha pasado unas semanas muy difíciles en su programa. Pues, su relación con una de sus mejores amigas dentro del programa, Anabel Pantoja, ha estado a punto de romperse. ¿Quieren saber cuál es la última hora de esta pareja televisiva? A pesar de que la sobrina de la tonadillera quiere pasar página, el público le ha dado un consejo que puede terminar de destrozar a Belén Esteban. ¿Ha perdido su trono la princesa del pueblo?
Belén Esteban confesó en 2020 que sus amigas Mila Ximénez y Carlota Corredera le habían ofrecido ayudarla económicamente para salir del bache. Pero, la princesa del pueblo se negó a recibir dinero de nadie. “Tengo que salir de esto yo sola”, declaró en Lecturas. Recientemente, ha tenido que enfrentarse a un problema con la vivienda que tuvo que entregarle Toño Sanchís para saldar su deuda. Al parecer, el representante dejó de pagar el último año de esta casa, por lo que el inmueble de la colaboradora ha generado una serie de cargas que se niega a subsanar. “¡No voy a pagar más!”, comentó muy enfadada. Por si todo esto fuera poco, Belén tiene que enfrentare a un nuevo problema que le puede hacer perder mucho dinero. Siguiente: La colaboradora se enfrenta a una demanda millonaria La colaboradora está al borde de la quiebra: ¡No voy a pagar más!
> Los rumores sobre la mala situación económica de Belén Esteban empezaron a sonar con fuerza en 2017. La mala gestión de Toño Sanchís, hizo que la colaboradora contrajera una importante deuda con Hacienda. Por aquel entonces, era propietaria de dos viviendas. Así que, tuvo que desprenderse una de ellas, concretamente el piso del barrio de San Blas, en Madrid. “Tengo que pagar 700.000 euros, y por eso debo que vender un piso al que tengo mucho cariño, porque lo compré con mi padre”, declaró una tarde en visiblemente emocionada. Una vez solucionado su problema con Hacienda, la tertuliana sufrió un profundo desgaste económico. Pues, la batalla judicial contra su antiguo representante le estaba costando mucho dinero, y ya había perdido todos sus ahorros.
