María Luisa del Guillén, más conocida como Yiya, fue concursante de Supervivientes 2020. Telecinco le dio una oportunidad perfecta para cumplir su sueño: hacerse famosa. Sin embargo, no supo aprovechar la fama, y terminó arremetiendo duramente contra el programa. Ha intentado convertirse en protagonista de la noticia en infinidad de ocasiones, incluso ha confesado un terrible trauma al que tuvo que enfrentarse cuando era tan solo una niña. No obstante, ningún periodista se ha interesado en su testimonio, pues parece que su carácter conflictivo es una fuente de problemas. Aunque, Yiya ha sabido invertir el poco dinero que le ha dado tiempo a ganar en televisión, y, actualmente, es propietaria de dos negocios exitosos. ¿Quieren saber cómo se gana la vida después de haber sido rechazada por la televisión? Te contamos el lado más oscuro de esta polémica empresaria
3Yiya confiesa que sufrió anorexia: “fue realmente inhumano”
> Yiya intentó cebar su personaje televisivo concediendo una entrevista a Lecturas donde confesó un terrible trauma al que tuvo que hacer frente cuando era tan solo una niña. Según contó, uno de sus novios le hizo sentir muy mal por su aspecto físico, pues le repetía constantemente que le sobraba demasiado peso. Esto hizo que adelgazase 8 kilos en dos semanas y, a partir de ahí, comenzó una cruel enfermedad que le causó grandes problemas. Yiya confesó que había padecido anorexia: “fue realmente inhumano, una gran autodestrucción”.
Este intento por ser protagonista se volvió en su contra. Sus palabras no enternecieron a ningún periodista, pues nadie lograba entender porque se burlaba del aspecto físico de Rocío Flores si ella había tenido los mismos problemas. Pero, Yiya siguió defendiendo su testimonio: “me servía comida y cuando mi madre se iba la devolvía. Hacía como que tosía, me limpiaba la boca y escupía lo que tenía dentro”, aseguró en Lecturas. Muy poca gente la creyó, y esta polémica entrevista fue su última oportunidad para convertirse en noticia. Yiya era consciente de que no contaba con el cariño del público. Así que, ya había empezado a labrarse un futuro fuera de los medios de comunicación.
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