Jorge Pérez, el ganador de la última edición de Supervivientes, parecía el ganador perfecto. De hecho se alzó con la victoria con el récord de apoyos en la votación, arrasando literalmente. Hasta ahora le amaban por cómo fue su participación, sus valores, su lucha, aunque, eso sí, sin meterse en ningún momento en conflictos.
Pero eso la audiencia lo valoró positivamente como contrapunto a las polémicas que rodean siempre los realities, donde la superviviencia suele pasar a segundo plano. Aquí fue diferente y el Guardia Civil se ganó el respeto de sus compañeros y de la audiencia. Pero del amor se ha pasado al odio y te mostramos el porqué.
Jorge Pérez, planes de modelo…
A tenor de los mensajes de los seguidores, o ex seguidores, no nos referimos a modelo de conducta, si no de pasarela. Ya lo insinuaba hace unos días en ‘Ya es mediodía’. «Estoy abierto a todas las puertas que se presenten siempre y cuando estén acorde a como soy yo. En el modelaje, me siento muy cómodo luego televisión, donde he ido, me han tratado muy bien«, declaró el ganador de Supervivientes. Incluso reconoció a Sónsoles Onega que le encantaría «venir de colaborador». En definitiva, tras su victoria va mostrando las cartas.
