El brutal enfrentamiento de ayer entre Ylenia Padilla y Kiko Matamoros es uno de los más impactantes que se han vivido en la historia del programa.
Si por algo es conocido Sálvame es precisamente por los numerosos conflictos y encontronazos que se producen a diario entre sus colaboradores. Lágrimas, gritos, amenazas con destapar trapos sucios y burlas son el día a día de uno de los programas con más audiencia de la parrilla televisiva. Sin embargo, el de ayer fue posiblemente uno de los programas más complicados para los tertulianos por la crudeza del enfrentamiento.
El programa invitaba ayer a Ylenia para verse las caras el que fuera uno de sus íntimos amigos en el pasado, Rafa Mora, al que después acusó de traicionarla y hablar mal de ella a varias personas de su entorno. Desde entonces, entre los valencianos la relación siempre ha sido tirante. Las últimas declaraciones de Rafa señalaban a Ylenia de «cínica», «falsa» y «mala gente».
Descontrol en plató
Lo cierto es que la tremenda bronca no se produjo entre Rafa e Ylenia, como cabía esperar, sino entre otro colaborador famoso también por sus duros ataques. Kiko Matamoros intervenía para defender a su amigo de una Ylenia implacable que se mostraba airada por el trato de favor que percibía hacia Rafa. De manera casi descontrolada, Kiko e Ylenia se veían envueltos en una discusión en la que se cruzaban todo tipo de insultos y acusaciones.
Pero sin duda el momento más tenso estaba por llegar. Ambos colaboradores se situaban de pie en medio del plató uno frente a otro, cuando Ylenia apartaba de un manotazo brusco a Kiko, mientras decía: «Tú a mí no me amedrentas». Matamoros abandonaba el plató de inmediato y afirmaba no estar dispuesto a permitir comportamientos de este tipo. La tensa situación obligaba a Paz Padilla, al frente del programa en ese momento, a desviar la atención del conflicto que se estaba produciendo. ¿Habrá vuelto la paz en el plató de Sálvame o veremos mañana la segunda parte de esta bronca?
