Jaime PeƱafiel no tiene simpatĆa por doƱa Letizia Ortiz. Es mĆ”s que evidente que desde que se anunciĆ³ el compromiso del por aquel entonces PrĆncipe Felipe con la periodista Letizia Ortiz, las palabras de PeƱafiel han sido como dardos en busca de hacer diana. Sin embargo, lo que ha ocurrido recientemente cruza todos los lĆmites.
Una guerra sin cuartel
> Las acusaciones de Jaime PeƱafiel son muchas. Aunque nunca se ha considerado monƔrquico, lo cierto es que el periodista ha intentando siempre ensalzar la figura del rey Juan Carlos en detrimento de cualquiera que estƩ a su lado. Es el caso de doƱa Letizia a quien, sin duda alguna, ha atacado de forma mƔs despiadada. El periodista ha llegado a criticar a la reina consorte no solo por sus debilidades protocolarias, sino tambiƩn por pertenecer a una familia normal: con unos progenitores separados y un abuelo taxista.
Pero en las Ćŗltimas horas PeƱafiel ha cruzado todos los lĆmites al insultar directamente a doƱa Letizia. Unas palabras que, en cualquier caso, demuestran que la guerra se ha recrudecido. Y de quĆ© manera. ĀæQuĆ© tipo de repercusiĆ³n tendrĆ”n estas declaraciones en Casa Real?
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PeƱafiel ataca a Letizia
>Ā Jaime PeƱafiel ha hablado de Letizia Ortiz en su columna de RepĆŗblica.com. Un artĆculo en el que reflexiona sobre una posible reconciliaciĆ³n del rey Juan Carlos y doƱa SofĆa y en el que aprovecha para arremeter, sin contemplaciones, contra la mujer de FelipeVI. Lo hace al recordar el cacareado desencuentro de SofĆa y Letizia en Palma de Mallorca: Ā«A raĆz de la agresiĆ³n de la inefable consorte a DoƱa SofĆa, el 6 de abril de 2018 al finalizar la Misa de ResurrecciĆ³n en la catedral de Palma de Mallorca, pienso que se ha producido un cambio visible en la relaciĆ³n entre Don Juan Carlos y DoƱa SofĆa. Todo el mundo pudo verlo. No solo la actitud violenta sino el pĆŗblico desprecio hacia su suegra. Primero, en la entrada a la catedral cuando desoyĆ³ los ruegos de Felipe pidiĆ©ndole esperara a sus padres que la seguĆan con pasos mas lentosm, dadas las dificultades del Rey para andarĀ».
Pero Jaime va mucho mĆ”s allĆ” y asegura que don Juan Carlos intentĆ³ mantener una conversaciĆ³n con su hijo justo en ese momento. AdemĆ”s de llamar violenta y agresiva a doƱa Letizia, tambiĆ©n asegura que es la que ha provocado la soledad indiscutible de doƱa SofĆa.
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La reina mĆnima, por Letizia
>Ā Esta semana Jaime PeƱafiel ha querido seguir hablando de Letizia en todos los medios en los que colabora. En este caso, se ha referido a ella en su columna de El Mundo. Bajo el titular, Ā«de la mĆ”xima de Holanda a la mĆnimia de EspaƱaĀ», el periodista hace una comparativa entre MĆ”xima de Holanda y Letizia Ortiz despuĆ©s de que la primera se dejara ver, bailara y disfrutara en la Feria de Abril que se ha celebrado en Sevilla hace unos dĆas. Para PeƱafiel, este gesto deja casi en ridĆculo a Letizia de quien, asegura, nunca se atreverĆ” a dejarse ver en una situaciĆ³n parecida: Ā«A propĆ³sito, Āæse imagina alguien a la mĆnima Letizia, no ya vestida de flamenca acudiendo a la Feria de Sevilla para saludar a su mĆ”xima colega, sino aĀ LeonorĀ yĀ SofĆaĀ vestidas de la misma guisa que Amelia, Alexia y Ariana lo han hecho?Ā».
Son precisamente las infantitas, Leonor y SofĆa contra las que mĆ”s veneno ha soltado recientemente. Sus palabras son casi censurables.
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Leonor, en el punto de mira
>Ā A pesar de que Leonor y SofĆa apenas aparecen en actos pĆŗblicos sino que mantienen su vida al margen de su posiciĆ³n social, nadie se ha hecho eco de una gran verdad: aquel Domingo de ResurrecciĆ³n le hizo un flaco favor a la princesa de Asturias. Y es que, aunque todas las crĆticas fueron para Letizia, su hija mayor tampoco ha salido muy bien parada de todo aquello. Ella fue la otra gran protagonista de ese momento. Cabe recordar que la niƱa tenĆa en su hombro la mano de su abuela y se la quitĆ³ de malas maneras. Un gesto que PeƱafiel ha interpretado de la siguiente manera.
Ā«Quien mas daƱada quedĆ³ con aquello fue, sin duda alguna, Leonor. Una niƱa que demostrĆ³ ser digna hija de su madre, que la estĆ” educando a imagen y semejanza. Ā”Hasta mira ya igual que mamĆ”!Ā», comienza a decir el experto en Casa Real. Ā«ĀæA quĆ© venia rechazar violentamente la mano de su abuela cuando Ć©sta la posaba, tan cariƱosamente, sobre el hombro de la nieta? No creo que tan mal gesto sea capaz de tenerlo con su abuela materna, Paloma, encargada de sus principescas nietas cuando mamĆ” se ausenta por viajes oficialesĀ», aƱadĆa.Ā PeƱafiel hace hincapiĆ©, ademĆ”s, en otro gesto reciente que tambiĆ©n hace tambalear la monarquĆa.
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El inesperado comportamiento de la infanta Elena
>Ā Parece que los malos modos no son solo cosa de los miembros de la Casa Real sino que es algo que se extiende por toda la familia. Muy sonada ha sido la salida de tono de la infanta Elena con la prensa a su llegada a Sevilla. En la estaciĆ³n de Santa Justa llamĆ³ Ā«gentuzaā a los fotĆ³grafos que allĆ la esperaba y calificĆ³ su presencia allĆ de ācoƱazoā. Un comportamiento que ha sido muy criticado por PeƱafiel, que conoce a la hija mayor del emĆ©rito muy bien.
āAunque no se puede comparar con los modos de Letizia hacia su real suegra, ElenaĀ ha demostrado ser una grosera y maleducada. Posiblemente, el trato con los caballos se le ha contagiado y cree que a la prensa se le puede tratar como a sus equinos. Aunque pensĆ”ndolo bien, seguro que a estosā¦ muchĆsimo mejor. Estoy harto, dolorosamente harto, del casticismo de esta mujer con sus malos modos y sus exabruptos. Siempre echo en falta la presencia de un periodista que le pare los pies y le diga Ā”de quĆ© coƱo vas!ā, aseguraba.