No atraviesa un momento fácil en ningún aspecto de su vida. Por eso sorprende que especialmente ahora Terelu Campos haya decidido poner en juego su puesto de trabajo. La estabilidad de la que gozaba en Mediaset está en jaque. Una desacertada (y ambiciosa) decisión puede acarrearle unas gravísismas consecuencias. Podríamos estar ante el ocaso televisivo de la hija más famosa de María Teresa Campos.
La historia de un currículum que ahora está de capa caída
> Como dice el refrán, de tal palo, tal astilla. Terelu Campos creció en un ambiente puramente periodístico que marcó completamente su vida. De hecho, desde muy joven decidió que no quería estudiar sino que su intención era trabajar. Así, comenzó su andadura radiofónica en distintas emisoras locales y nacionales. Pero el gran boom de la hija mayor de Teresa Campos se produjo con su salto a la televisión. Al principio también sintió cierto gusanillo por la interpretación, pero aquello fue breve y se centró en el mundo del entretenimiento.
Tras trabajar codo con codo con su madre, pudo volar en solitario y hacerse un nombre propio. De hecho, tuvo mucho éxito al mando del magazine Con T de Tarde, donde estuvo prácticamente una década. Después de aquello no le dejaron de llover proyectos, se había convertido en un auténtico peso pesado (además de ser una de las mujeres más deseadas). Sin embargo, el otro punto álgido de su carrera hay que situarlo en 2010. Fue entonces cuando se incorporó a Sálvame, un programa al que ha sido desleal tal y como te contamos a continuación.
Siguiente: Una inesperada traición y sus consecuencias
Una inesperada traición y sus consecuencias
> Es cierto que los nueve años que lleva Terelu trabajando en Sálvame han estado llenos de altibajos. Entró pisando fuerte, muy fuerte. De hecho, los directivos de la productora confiaron en ella para conducir la versión de fin de semana, el Deluxe, durante las vacaciones. Pero pronto quedó relegada a un segundo plano. Algo que le costó bastante digerir ya que fue una auténtica cura de humildad para alguien que siempre lo tuvo todo. Hay que tener en cuenta que su madre ha sido durante décadas una mujer muy poderosa que se encargó de que sus hijas ocuparan los mejores puestos.
A pesar de todo, Terelu Campos debe estar agradecida a Sálvame y a su cúpula. En las dos ocasiones que ha sufrido el terrible azote del cáncer todos la han apoyado incondicionalmente. Además, no solo se lo han demostrado con palabras sino también con actos. Ha dejado que sea ella quien marque los tiempos. La han dejado decidir cómo y cuándo volver. También le guardaron su sitio cuando decidió abandonar la tele temporalmente por voluntad propia la no sentirse feliz. Por todo esto resulta una auténtica aberración que ahora se porte de la manera que te detallamos en la siguiente página.
Siguiente: El regreso de su etapa gloriosa
El regreso de su etapa gloriosa
> En cuanto ha tenido la oportunidad, Terelu ha dado esquinazo a Mediaset para volver a Telemadrid, donde fue durante años la reina indiscutible. La andaluza ha participado en Huellas de elefante, programa conducido por su amigo Goyo González. Ha visitado este espacio de biografías para aportar datos y anécdotas de Raphael, artista con el que su familia guarda una enorme amistad desde siempre. Junto a ella han estado personalidades menos mediáticas como Ángel Antonio Herrera, Marina Castaño y Luis del Val.
Es cierto que se trata solo de una colaboración esporádica, pero la realidad es que este hecho tiene un claro trasfondo. El ego de Terelu es tan desmedido que hace lo imposible por volver a la cadena en la que no tenía rival. Lo que busca es aparecer en más ocasiones, quiere que le devuelvan su reinado. De hecho, hace unos meses ejercía como madrina en la primera emisión de Aquí hay madroño. Entonces, el presentador, David Valldeperas, le ponía la miel en los labios al deslizar que quizá le daban un programa propio en su querido Telemadrid… Pero ese momento aún no ha llegado y ella está desesperada. A continuación, mira a lo que ha recurrido.
Siguiente: Un intento desesperado por seguir en el candelero
Un intento desesperado por seguir en el candelero
> Mientras que su madre se enfrenta a su amargo adiós televisivo, Terelu Campos se encuentra en el lado opuesto. Ella está intentando dejarse ver por el máximo número de sitios posible. Busca protagonismo y notoriedad porque le da miedo desaparecer de la noche a la mañana del foco mediático. Especialmente ahora que tiene que hacer frente a una elevadísima deuda que nació en el momento que se compró un tríplex en Aravaca (Madrid). Una espectacular vivienda cuya hipoteca ha ampliado en varias ocasiones hasta llegar a una deuda de prácticamente un millón de euros.
Con la finalidad de hacer ver que es imprescindible en el caprichoso mundo del entretenimiento, Terelu ha jugado su última baza. Ha aparecido por sorpresa en uno de los vídeos que su hija, Alejandra Rubio, cuelga semanalmente en su canal de Mtmad, Black Sheep. Su manera de atraer a los espectadores ha sido protagonizar un cara a cara con el nuevo valor en alza de las Campos. Junto a la joven se ha sincerado y ha hablado de aspectos privados que hasta ahora no habían visto la luz nunca.
Siguiente: El irremediable declive de Terelu Campos
El irremediable declive de Terelu Campos
> Terelu está muy preocupada porque sabe que su imagen pública se está deteriorando. Lejos de lo que ella creía (o quería creer), el público no se siente cómodo escuchando sus continuos testimonios acerca del cáncer de mama que ha sufrido en dos ocasiones. Además, la acusan de ser una mujer frívola que es capaz de todo por ganar dinero. Creen que no es positivo comercializar con un tema tan doloroso para la inmensa mayoría de la sociedad.
No entienden cómo Terelu puede llorar amargamente en televisión y luego, de puertas para afuera, tener un comportamiento tan irresponsable. Recordemos que hace solo unos días era fotografiada mientras fumaba, algo completamente prohibido en alguien que, además, está sufriendo graves problemas de cicatrización tras someterse una doble mastectomía. La credibilidad de Teresa Lourdes está por los suelos, y eso es muy difícil de levantar.
