El que fuera representante de Belén Esteban se ha enfrentado a la subasta de su casa. Con ello saldará su deudas con el banco y con la que fuera su exrepresentada. La última puja para la vivienda de 450 metros cuadrados ha sido de 350.000 euros. Un mal trago para Toño Sanchís, quien tendrá que decir adiós a su hogar muy pronto.
El conflicto de Toño Sanchís con Sálvame
> Es evidente que el momento no es el mejor. Toño intenta restarle importancia a una situación límite que puede dejar a su familia en la calle. Pero no solo eso, pues ahora va a iniciar un nuevo conflicto de consecuencias desconocidas hasta la fecha.
Fue durante la emisión de Sálvame cuando se vivieron momentos de máxima convulsión. El reportero Kike Calleja hacía guardia en la puerta de la casa de Toño para recoger su primera reacción. Sin embargo, el representante hacía caso omiso al programa y abandonaba el domicilio en compañía de uno de sus hijos menores. Fue entonces cuando, en una guerra sin precedentes, reportero y cámara evitaron obtener la imagen del pequeño para que no tuviera un problema mayor. Sin embargo, según ha podido saber Cotilleo.es, Toño ha tomado una decisión.
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