Doña Letizia tiene un problema. Por más empeño que pone, no consigue empatizar con una parte de la sociedad. Se trata de uno de los temas que más le preocupan. Letizia está harta de quedar como perdedora cuando la comparan con doña Sofía. Sin duda, su suegra es como una sombra que la persigue hasta atraparla. La soberana lucha por ser aceptada, se entrega a fondo en todo lo que tiene que ver con su obligación real. Sin embargo, en algún punto del trayecto, el mensaje se pierde. ¿Por qué Letizia no da la talla como reina? Desvelamos el misterio.
7El gusto por el lujo
En los primeros años como princesa, doña Letizia se quejaba de que su trabajo pasara desapercibido y solo se pusiera el foco en su vestuario. Así se manifestaba en aquellos días: “No se fijan más que en el vestido que llevo o en cuál es la razón que me ha llevado a elegirlo para esa ocasión”. Paradojas de la vida, muchos la incluyen ahora en el grupo de las fashion victims, llegando a compararla con Rania de Jordania o la desaparecida Lady Di.
A pesar de que se intenta propagar la idea de que la reina es una mujer austera en cuanto a sus gastos en ropa y complementos, lo cierto es que hace ya un tiempo que se decanta por firmas de alta costura. No se sabe si esto es influencia de su estilista o bien que le ha cogido el gusto al lujo. Algunos de sus looks han sido criticados por lo elevado de su precio.