Hace casi dos meses que salió a la luz el primer libro de Coto Matamoros, llamado ‘Libro de reclamaciones’. Tras permanecer muchos años fuera del foco televisivo, ha vuelto ‘a toda página’ y sin dejar títere con cabeza, tal y como nos tenía acostumbrados. Su principal enemigo son las Campos, y no nos cabe ninguna duda.
En el libro dedica tres páginas enteras a hablar sobre su experiencia con Campos madre y Campos hijas. Se atreve, a su vez, a opinar sobre el presente profesional de las comunicadoras. Nosotros queremos analizar en profundidad cada frase con la que Matamoros define a la familia televisiva.
El cinismo de María Teresa con Mediaset
La relación de María Teresa Campos con Mediaset no empezó siendo, precisamente, envidiable. Cuando el programa Día a Día, emitido en Telecinco, pasó a tener lugar en Antena 3, ella sintió una liberación y así se lo hizo saber a Coto Matamoros en su día: «Se reunió con Maurizio Carlotti y le agradeció que le hubiesen liberado de la ‘mafia calabresa’ que gobernaba Telecinco«. Esas fueron las palabras de la presentadora hacia la cadena. Lo que no se imaginaba por aquel entonces es que, poco después, se convertiría en su trabajo durante muchísimos años.
También tuvo palabras para sus hijas, Carmen y Terelu, a las que, en una fuerte discusión, acusó de estar perjudicándole en su vida profesional. Por si eso fuera poco, mandó un mensaje a la audiencia en el que aseguraba que no se le habían reconocido todos sus años de trabajo: «¡la gente es muy desagradecida, qué hijos de puta!»
La relación entre María Teresa y Paolo Vasile -consejero delegado de Mediaset- no es del todo buena. Ella reconoció insultarle hace casi quince años, y desde entonces parece que Vasile no perdona. Hace casi dos años que le quitó «su» programa, QTTF. Sus hijas aseguraron que fue el consejero el que dio la espalda a su madre con la decisión que tomó. Decisión que, en parte, nos sorprendió. Recordemos que cuando María Teresa Campos estuvo ingresada en el hospital por el ictus, él fue a visitarla.
