comscore

Juguetes rotos: de Estibaliz Sanz que ahora es barrendera a María José Galera

 

La televisión es uno de los medios más rápidos para hacerse famoso pero también para caer en el olvido. Dejas de salir y la gente se olvida. Mientras el foco alumbra, la vida en rosa. Cuando se apaga, fundido a negro. Desaparecen quienes te rodeaban durante el éxito y se proclamaban amigos. Notas algo extraño cuando les llamas por teléfono y todo son excusas. Hay que estar muy preparado mentalmente para asimilar caer en un agujero negro y profundo. Y entonces te preguntas, ¿cómo llegó la noche? Hacemos un repaso por los famosos que se convirtieron en juguetes rotos.





Juguetes rotos: de Estibaliz Sanz que ahora es barrendera a María José Galera

María José Galera formó parte de la primera edición de Gran Hermano. Aquello fue un auténtico éxito de audiencia. Dado que ninguno de los concursantes tenía ni idea de cómo discurriría el reality, se mostraron tal cual eran. Sin aditivos ni artificios. La mecha del amor prendió fuerte entre María José y Jorge Berrocal. El día en que la andaluza fue expulsada, él manifestó: “No lloréis, que me voy a casar con ella”.

Estaba previsto que Galera fuera portada de una importante cabecera rosa cuando estalló un escándalo que la ligaba a la prostitución. Aquello fue muy duro de sobrellevar, pues eran muchas las opiniones que se vertían al respecto. Berrocal dijo que nada tenía que decir sobre el pasado de su chica. Se fueron a vivir juntos y la cosa funcionó durante un tiempo. Sin embargo, la ruptura se produjo con mucho ruido. Durante años, se enfrentaron en los platós llegándose a acusar de cosas muy feas.

Con el tiempo, todo se acaba, Galera comprendió que ya no se podía estirar más el chicle de la fama y que tenía que iniciar una nueva vida. El golpe más duro se lo llevó cuando falleció su hija mayor, Estefanía, que nació aquejada de parálisis cerebral: “Cuando muere mi hija, yo caí en una depresión bastante grande, pensando incluso en la muerte y en irme a su lado”. Sin embargo, consiguió aprender a vivir con el dolor. Tiene dos hijas más, nacidas de posteriores relaciones.

Viendo que en España no tenía futuro, María José puso rumbo a México con su nueva pareja y sus dos hijas. Se la veía feliz en su nueva vida. Hacía años que no sabíamos de ella cuando nos sorprendió participando en Gran Hermano, el reencuentro. Estuvo once días y después regresó al país azteca. Pues bien, su aventura al otro lado del charco no ha acabado bien. Galera ha expresado que ni su marido ni ella tuvieron buen ojo a la hora de escoger a los socios con quienes poner en pie un club de pádel. En uno de sus viajes a España, estos sujetos desvalijaron su casa. Parece ser que lo pasó fatal y que vivió más episodios para olvidar. Ella y sus hijas ya están en Sevilla. Su marido no ha podido viajar porque aseguran sobre él pesaría una supuesta orden judicial por no hacer frente a la manutención de sus hijas.