Durante mucho tiempo se ha hablado de Victoria Federica como la persona más tranquila, responsable y cariñosa de los Borbones. Sin embargo, en los últimos tiempos las cosas han cambiado. La joven está dispuesta a ser ella misma, sin limitaciones ni restricciones. Algo que ha despertado la ira de Letizia, con la que su relación ya nada tiene que ver con antes.
Una perfecta convivencia con los flashes
> Desde su nacimiento ha convivido con los flashes. No en vano, es hija de la infanta Elena y Jaime de Marichalar, algo que la puso en el disparadero nada más llegar al mundo. A pesar de que una parte de su infancia la ha pasado estudiando fuera de nuestras frontera, su vida siempre ha interesado y ha generado noticias. Además, Victoria Federica es de esas niñas que se ha dejado ver a menudo con su familia compartiendo vacaciones, planes de ocio… Con su madre especialmente, y es que las dos comparten aficiones como la hípica, la fotografía, los toros… En los cosos suele dejarse ver también con su abuelo materno, el rey Juan Carlos, del que ha heredado su pasión por esta tradición tan cañí.
Pero con su llegada a la mayoría de edad todo ha cambiado. Su presencia en los sitios supone un gran reclamo. Cada uno de sus movimientos es analizado al detalle, algo con lo que no parece sentirse incómoda. La joven se deja ver con frecuencia haciendo planes con sus amigos, entre los que se encuentra uno especial, el diestro Gonzalo Caballero. El hecho de que no evite a los flashes enfada sobremanera a su tía Letizia. Y es que la Reina detesta que su círculo íntimo esté en medio del foco mediático. Su intención no es otra que evitar que estas noticias (especialmente si son polémicas) la salpiquen directamente. Es por esto que la última decisión de la joven ha puesto en jaque a Zarzuela. Sigue leyendo y entérate.
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