No es el mejor verano para Andrea Janeiro. La hija de Belén Esteban y Jesulín de Ubrique se encuentra en España disfrutando de sus vacaciones de verano. Pero no todo están siendo buenos momentos.
Se sigue hablando de ella en los platós de televisión y su madre sigue entrando al juego. Se contradice y acaba pidiendo respeto para ella. Su padre no ha querido verla por su diecinueve cumpleaños. Sin embargo, le ha invitado a su vuelta a los ruedos. La presión de Andrea y su decisión más difícil… a continuación.
Belén Esteban: principal «culpable» de la presión mediática de su hija
Si hay algo que nos ha quedado claro, es que a ella la fama y mundo de los famosos no le interesa, ni le atrae lo más mínimo. Es consciente de que sus padres son dos de los personajes del corazón por excelencia. En ese sentido, es todo lo contrario a su madre, Belén Esteban, que en su día fue la primera en hablar y presumir de su hija, siendo esto todo un plus para su continuidad en televisión. Pero todo eso ha cambiado desde hace un año.
La negativa de la colaboradora, de repente, a que alguien hable sobre su hija, no ha gustado a todos. Su sorprendente actitud fue criticada por muchos, que aseguraban que carecía de sentido el hecho de estar 18 años hablando de ella y pretender que ahora nadie la nombre. La decisión de Andrea de no ser un personaje público, está teniendo sus consecuencias, sin querer, para su madre. Día tras día, pide en Sálvame Diario que no se nombre a su niña. De tanto pedirlo, creemos que provoca el efecto contrario. Los excesos nunca han sido buenos.
