Iñaki Urdangarín ha recibido un duro varapalo después de que la Audiencia de Palma haya rechazado concederle el tercer grado penitenciario amparándose en la alarma social que generaría. Sin embargo, no ha aplicado los mismos argumentos para Diego Torres y Jaume Matas, los otros grandes condenados por el caso Noos, que sin embargo, y a diferencia del marido de la Infanta Cristina, sí han conseguido el régimen de semilibertad que les permite reinsertarse poco a poco en la sociedad.
Mario Pascual Vives, abogado de Urdangarín, ya ha declarado que ve un agravio comparativo de su representado con su ex socio en la Fundación Noos, Diego Torres, y el expresidente balear, Jaume Matas. Sin embargo, el marido de la Infanta Cristina prefiere mantener su habitual silencio y evita pronunciarse sobre este tema.
Con la mascarilla ocultando parte de su rostro, y su inseparable bolsa al hombro, el cuñado del Rey Felipe VI llega al centro Don Orione para realizar, un día más, su labor de voluntariado, y guarda silencio ante las preguntas de la prensa acerca del tercer grado del que pueden disfrutar Matas y Diego Torres pero él no. Apresurado, Urdangarín evita confesar si considera injusta la resolución judicial que le priva de alcanzar la ansiada semilibertad.
