El hijo mayor del dictador Fidel Castro, del mismo nombre que su padre, se ha quitado la vida a los 68 años de edad. Un final del todo inesperado, pero confirmado, a pesar de todas las veces en las que se «mató» a su padre en vida. El hombre estaba pasando por un fuerte proceso de depresión, que le ha llevado a suicidarse, tal y como han informado los medios cubanos oficiales.
«El doctor en Ciencias Fidel Castro Díaz-Balart, quien venía siendo atendido por un grupo de médicos desde hace varios meses con motivo de un estado depresivo profundo, atentó contra su vida en la mañana de hoy primero de febrero», confirmaban los periódicos de la zona, informando de la muerte del hijo de Fidel Castro.
Fidel Castro hijo fue la única descendencia que tuvo el dictador con su primera mujer, y el primogénito del mandatario. A pesar de los intentos por que consiguiera superar la depresión, finalmente se ha quitado la vida. Estuvo ingresado en un hospital, y como se encontraba mejor, le dieron el alta, pero manteniendo el tratamiento de manera ambulatoria.
Sin embargo, parece ser que no se tomaron las medidas suficientes para evitar que tomara esta drástica decisión contra su vida. Un hecho que seguro ha dejado muy conmocionados a todos los cubanos.
Fidelito, que era como era conocido en Cuba el hijo mayor de Fidel, estudió en la Unión Soviética bajo el seudónimo de José Raúl Fernández, evitando los peligros de su seguridad. Allí consiguió ser científico, titulándose en el Instituto Superior de Ciencia y Tecnología Nucleares. Por eso, se puso al frente de la carrera nuclear del país dirigido por su padre, en un puesto de gran prestigio. Sin embargo, en el año 1992 fue destituido de todas sus funciones por su ineficiencia.
Posteriormente, fue ocupando puestos de menor relevancia, pero que le llevaban al terreno internacional, siendo el embajador de Cuba en las relaciones entre países que apostaban por investigar e invertir en energía nuclear. A pesar de lo pública que fue su familia, intentó llevar una vida lo más discreta posible, y muy poco se sabía de su enfermedad. Tuvo una mujer y tres hijos, todos ellos alejados de la vida pública.
De hecho, la última vez que fue visto en público fue el pasado mes de agosto, cuando la Academia de las Ciencias de Cuba investía al Premio Nobel de Química Peter Agre, un evento en el que él apenas tuvo protagonismo, y que quedará siempre como la última aparición pública del hijo de Fidel Castro.
