Club de Campo de Madrid. Cayetano Martínez de Irujo disfruta de una tarde equina en compañía de Bárbara, su joven novia. Ambos están sentados en uno de los palcos reservados para celebridades y miembros destacados de la equitación. Muy cerca, una conocida presentadora ríe a mandíbula batiente con las ocurrencias de su acompañante, un señor de hechuras admirables, que tornea su cabeza para ver con quien comparten atención de los allí presentes. Ella también mira. El contacto visual entre Bárbara, Cayetano y los dos otros convidados se produce casi de forma instantánea.
Me insisten en que se genera un ambiente muy tenso e incómodo que acaba con Cayetano y el acompañante de la presentadora enfrentados. Un malentendido hizo, al parecer, que la tensión fuera aumentando considerablemente y de forma paulatina. Me explican que Cayetano no pudo controlar sus nervios y se comportó de forma poco decorosa con el susodicho después de entender como provocación un gesto dirigido a su pareja. Tras las palabras, llegaron los hechos. El altercado sorprendió a propios y a extraños.
Pasado el tiempo, calmadas las aguas, insisten en que la presentadora se acercó a Cayetano para conversar con él e intentar llegar a una entente cordial. No obstante, afirman que no hubo entendimiento. Sin embargo, Cayetano sostiene que lo relatado no se ciñe a la verdad y que cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. En contacto telefónico con el hijo de la Duquesa De Alba, ha preferido no dar su versión de lo ocurrido.
