Como muchos ya saben los medios suelen mostrar los rostros de moda, con más frecuencia. El motivo es muy simple: Todo el mundo desea ver a su personaje de moda de nuevo, conocer más de su vida. Y, de pronto, los presentadores, los colaboradores… que eran insustituibles, resultan ser sustituibles por nuevos rostros de moda y, con el tiempo, se convierten en viejas glorias. Es muy difícil saber mantenerse en la cima de la fama. Tanto que estos personajes, han fracasado en el intento.
Carlos Lozano: De icónico presentador a ser una vieja gloria
Carlos Lozano el icónico presentador de Operación Triunfo, en las dos primeras ediciones causó furor. Era conocido por todos y deseado por muchas cadenas de televisión. No obstante, como ya hemos ido anunciando, mantenerse en la fama es muy difícil y, si juegas mal tus cartas, te puede pasar lo mismo que a él.
Se podría decir que desapareció del panorama televisivo para volver en forma de concursante de Gran Hermano Vip. Pequeños datos destacables hay entre esos años de diferencia. Eso sí, su aparición tras el reality show, en Sálvame fue impactante.
Volvió con un injerto de pelo, muy poco disimulado, y en Sálvame diario con una sección llamada el Defensor del pueblo. Pero quería más, necesitaba volver a ser reconocidos por todos. Y, entre risas,» fingió» su desaparición. «Se le ha perdido la pista», argumentaron los redactores del programa. Denuncia a la policía. Y de pronto, apareció argumentando que su teléfono estaba roto.
Consiguió su objetivo: Estar en la boca de todos. No obstante, su objetivo duró apenas unas horas, pues volvió al olvido.
