Está claro qué Carmen Borrego ha llegado para quedarse. No solo porque se ha convertido en una de las habituales del papel cuche, sino porque parece haberse hecho un hueco en la pequeña pantalla. Todo vale para seguir en la primera línea. Incluso mentir ahora que se está sometiendo a una dieta en directo a través de las cámaras de Sálvame. Y la hemos pillado con las manos en la masa. Atención a las fotografías exclusivas que mostramos.
Ponerse en forma como primer objetivo
Borrego pretende ponerse en forma. Deshacerse de los kilos de más que golpean su autoestima y que evidencian que, aunque se haya sometido a diferentes intervenciones quirúrgicas, sigue sin estar contenta con su cuerpo. Carmen se mostró exigente a la hora de escoger a su entrenador físico y, por supuesto, aceptó las directrices de los nutricionistas que confían en ella en un reto que puede, sin ningún género de dudas, ser un arma de doble filo. Si la hija de María Teresa Campos asegura que está siguiendo las pautas marcadas y no pierde peso, el prestigio de los profesionales puede verse notablemente afectado. Por eso hemos querido seguir a Carmen cuando piensa que nadie se encuentra detrás de ella. Y lo que hemos descubierto nos ha sorprendido mucho. Incluso nos parece la confirmación de la mayor tomadura de pelo de la historia.
