Blanca Suárez está viviendo su mejor momento. Al menos en el terreno sentimental donde su relación con Mario Casas le ha devuelto la ilusión en el amor. Las imágenes publicadas por la revista Corazón sirvieron para confirmar que, en contra de lo que ellos mantenían, lo suyo era una bonita historia de amor: «Las fotografías son las fotografías y yo no puedo decir nada más», confesaba ella durante un acto promocional. Tras la difusión de las primeras fotografías, sus besos y carantoñas han ocupado otras portadas. También se han convertido en uno de los temas más buscados en el ciberespacio.
Un look muy sorprendente
Es, el amor, el sentimiento que nos envuelve con un áurea especial. Lucimos mucho más atractivos. Sin embargo, la actriz no parece preocuparse demasiado por su apariencia física. A tenor de las imágenes a las que ha tenido acceso Cotilleo.es, Blanca Suárez no tiene ningún inconveniente en salir a hacer sus tareas habituales bastante descuidada. La vimos hace unos días mientras paseaba a su perro, Postacho, por las calles de Madrid.
Con el pelo algo descuidado, ropa que simula a un pijama y chanclas de la playa paseaba sin importarle que los fotógrafos le pudieran inmortalizar. Lo cierto es que con su sorprendente e inesperado look pasaba completamente desapercibida entre la multitud. Quizás esa puede ser una explicación del descalabro de estilo de la querida actriz.
Eso sí, no sabemos si después de la publicación de estas fotografías Blanca podrá seguir ostentando el título a una de las influencers más seguidas en las redes sociales.
