¿Sabías que estas celebridades también tienen cuentas para empresas?

Cuenta bancaria

Detrás de los focos, las alfombras rojas y los millones de seguidores, muchos famosos también tienen algo muy terrenal: una cuenta bancaria pensada para gestionar sus negocios. Sí, cuentas para empresas, como las que podrías abrir tú mismo si estás pensando en crear tu propia empresa o llevar tu proyecto más allá del Instagram personal.

Porque más allá del glamour, la realidad es que las celebridades también hacen números. Y vaya si los hacen.

De estrella a empresari@, sin pausa

En los últimos años, ser famoso y emprendedor parece ir de la mano. Algunos lo hacen por pasión, otros por estrategia, y hay quienes simplemente no quieren dejar todo su dinero en manos de terceros. Pero en todos los casos hay un punto en común: organizar sus finanzas como empresa, no como individuo.

Lo curioso es que muchas de estas figuras públicas no solo tienen una marca, sino que la gestionan como cualquier pyme: con gastos, inversiones, pagos de impuestos y, por supuesto, cuentas separadas para evitar líos fiscales.

Y sí, también se equivocan. Algunos terminaron en titulares por no declarar bien sus ingresos o por usar cuentas personales para operaciones empresariales. Un error más común de lo que crees y que tú mismo podrías evitar desde el principio si decides separar bien lo personal de lo profesional.

Famosos que ya gestionan su empresa como los grandes

Aunque no lo digan en voz alta, algunos de los rostros más conocidos del panorama español e internacional tienen sus cuentas para empresas bien montadas. No solo hablamos de cantantes y actores; también influencers, chefs, deportistas y hasta exconcursantes de realities que supieron ver una oportunidad más allá de su momento de fama.

  • Rosalía, por ejemplo, no solo factura por su música. Su equipo tiene sociedades registradas para gestionar campañas de publicidad, derechos de imagen y colaboraciones internacionales.
  • Dabiz Muñoz, el chef con estrella Michelin, mueve su imperio gastronómico con estructuras empresariales bien diseñadas. Lo mismo sucede con su pareja, Cristina Pedroche, que también gestiona sus proyectos con cuentas corporativas.
  • Ibai Llanos, aunque se lo tome todo con humor, tiene una estructura empresarial seria detrás de cada evento, directo y colaboración. Y eso implica cuentas bancarias pensadas para su empresa, no para él como persona.

¿La clave? Separar identidad personal de actividad profesional, algo que cualquier emprendedor debería plantearse desde el minuto uno.

¿Y qué pinta todo esto contigo?

Quizá no tengas millones en el banco, ni una marca global… todavía. Pero si estás lanzando tu tienda online, tu consultora de diseño, tu marca de ropa artesanal o tu canal de YouTube, ya estás dentro del juego. Y créeme, tener una cuenta pensada para empresas puede marcar la diferencia.

¿Por qué? Porque te ayuda a tener control. Y cuando hay control, hay claridad, profesionalismo, menos estrés y, en muchos casos, más ahorro. No estás solo en esto, cada vez más personas están empezando a crear su propia empresa con estructuras claras y herramientas reales.

Y sí, eso incluye bancos que ofrecen servicios adaptados al tipo de empresa que estás creando. Si te interesa saber qué opciones existen ahora mismo en el mercado, aquí puedes ver un resumen actualizado de cuentas específicas para empresas.

¿Vale la pena dar el salto?

Puede que estés en ese punto de tu vida en el que tu proyecto ya no cabe en un Excel casero. Tal vez estás empezando a facturar más de lo que esperabas o a recibir pagos desde fuera. Y ahí es cuando lo personal y lo profesional deben tomar caminos distintos.

Crear una cuenta para tu empresa no solo es un paso administrativo, es una declaración de intenciones. Es decir: “Esto va en serio”.

Además, te abre la puerta a deducciones fiscales, crédito empresarial, herramientas de facturación, y una imagen mucho más profesional ante proveedores, colaboradores o clientes. Y si un famoso lo hace para gestionar una línea de perfumes, tú puedes hacerlo para manejar tu marca personal, tus servicios o tu tienda digital.

Tú no necesitas ser famoso. Solo necesitas claridad

No hace falta tener una gira mundial ni millones de seguidores. Lo que necesitas es estructura. Como lo hacen muchos influencers que gestionan sus ingresos a través de cuentas empresariales, o pequeños emprendedores que decidieron profesionalizarse desde temprano.

Y si llegaste hasta aquí, probablemente ya lo estás considerando.

Así que si te estás preguntando cómo empezar, lo primero es informarte bien.