Trucos de maquillaje para pieles maduras

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Fuente: istockphoto

Con el paso del tiempo, la piel cambia. Pierde elasticidad, se afina, aparecen líneas de expresión y manchas que antes no estaban ahí. Pero eso no significa que haya que renunciar al maquillaje, ni mucho menos. De hecho, con los productos correctos podrás conseguir un efecto rejuvenecedor de forma rápida y sencilla.

En este artículo te explicamos cómo tener un rostro luminoso y descansado, de forma natural, algo que está al alcance de cualquier mujer, tenga la edad que tenga.

¿Cuál es el mejor maquillaje para pieles maduras?

Aunque no hay una respuesta única en este sentido, algunas marcas se han especializado en entender las necesidades de las pieles maduras, como por ejemplo los diferentes productos de maquillaje apta para pieles maduras de Lancôme. En este tipo de productos se prioriza la hidratación para no resecar la piel y marcar líneas de expresión, y el uso de pigmentos luminosos que aportan frescura y vitalidad al rostro.

Tutorial de maquillaje para pieles maduras

Veamos algunos trucos de maquillaje para pieles maduras y otros consejos sencillos pero efectivos para destacar su luminosidad y frescura.

1. Preparación: el paso que marca la diferencia

La hidratación es la base del éxito en cualquier maquillaje para pieles maduras porque permite que la piel se vea más tersa y luminosa, y que el maquillaje se asiente mejor.

Así que preparar bien la piel con una buena crema hidratante es el primer paso que hay que seguir antes de aplicar cualquier producto y es algo que determinará el resultado final de tu maquillaje. Utiliza un sérum con ácido hialurónico o una crema efecto lifting antes de la base y verás la diferencia. Y, si tienes manchas o tono apagado, un primer con pigmentos iluminadores te ayudará a unificar y dar frescor al rostro.

2. Base ligera y luminosa: menos es más

Uno de los errores más comunes es utilizar bases demasiado cubrientes, porque el producto se acumula en las arrugas, acentuando las líneas de expresión.

Sin embargo, la mejor base de maquillaje para pieles maduras tiene que ser fluida, con acabado satinado o glow, y aportar luz sin marcar la textura. Lo ideal son fórmulas con colágeno, péptidos o vitamina C.

Y aquí te damos un truco: mezcla la base con un poco de iluminador líquido y aplícala con esponja húmeda a toquecitos. Esto unificará el tono y aportará un acabado natural, sin apelmazar.

3. Corrector estratégico: luz donde hace falta

Elige siempre un corrector cremoso y luminoso, y aplícalo solo en zonas clave: ojeras, comisuras de la boca y laterales de la nariz.

Cuidado con cubrir toda la zona de la ojera porque puede marcar más las arrugas. Difumina con el dedo anular, que tiene menos fuerza, para fundir bien el producto con la piel.

4. Polvos, solo los justos

Los polvos matificantes pueden ser un enemigo si se abusa de ellos. Si buscas un maquillaje natural para pieles maduras recuerda usarlo solo en zonas muy concretas: centro de la frente, laterales de la nariz y barbilla. Usa polvos finos y aplícalos con una brocha grande y ligera, pero si tu piel es muy seca lo mejor sería prescindir de ellos.

5. Colorete y luz: la clave del efecto lifting

Lo mejor del colorete es que, si se aplica de forma adecuada, puede generar un efecto lifting natural. Si en los 80 se solía poner en la manzana de las mejillas, hoy la tendencia ha cambiado, enfocándose en la parte alta del pómulo para difuminar hasta las sienes. Así se  consigue un efecto mucho más favorecedor.

Además, puedes añadir un toque de iluminador en el arco de la ceja, en el lagrimal y en lo alto del pómulo para abrir la mirada.

6. Define la mirada de forma natural

Con los años, los párpados pierden firmeza, por eso conviene evitar sombras muy oscuras o brillos exagerados. Opta por tonos neutros, satinados y cálidos (beiges, rosados, marrones suaves).

El delineador es un punto crítico al que prestar más atención: la línea debe ser fina, nacer de la raíz de las pestañas y alargarse del centro hasta el rabillo del ojo, en sentido ascendente.

Si tus cejas se han vuelto más finas o tienden al gris, puedes rellenarlas, pero siempre sin exagerar, evitando trazos demasiado duros.

7. Labios con volumen

Aquí la elección del tono cobra especial importancia: evita colores oscuros o mates, ya que empequeñecen el labio y marcan arrugas. Mejor un labial cremoso, en tonos naturales como coral, rosa medio o nude cálido.

Puedes aplicar un poco de gloss en el centro para crear un sutil efecto volumen, y si el contorno está desdibujado, perfilar con un lápiz del mismo tono que el labial para evitar que se corra.

En definitiva, cuando se llega a una edad más avanzada, la clave está en apostar por un maquillaje para pieles maduras que sea capaz de realzar tu belleza natural, prefiriendo productos más sofisticados que conviertan tu rutina en una auténtica experiencia.

Porque la belleza no tiene edad, pero sí buenos aliados. Y el maquillaje puede ser uno de ellos.