La caída del cabello, una de las mayores inquietudes estéticas de nuestra sociedad, se intensifica con la llegada del otoño. Factores como la alimentación, las hormonas y la microbiota intestinal contribuyen a este fenómeno.
A pesar de ser una preocupación estética, la pérdida de cabello afecta profundamente a quienes la experimentan. El Doctor Javier Morán, Catedrático y Director del Instituto Universitario de Innovación Alimentaria de la UCAM, destaca que la pérdida de cabello es una de las principales preocupaciones estéticas en hombres y mujeres.
Aunque es menos común en estas últimas, cada vez más mujeres enfrentan este problema, generalizándose la inquietud. Desde VR6, señalan que esta preocupación se acentúa en otoño, pero no solo por la temporada de la caída de las hojas, sino por diversas razones que exploraremos en detalle.
La caída estacional y su diferenciación de la alopecia
La caída estacional, como su nombre indica, ocurre debido a la temporada en la que nos encontramos, siendo más notable en otoño. Aura Serras, directora de RevitaLash Cosmetics, explica que este fenómeno puede deberse al daño causado por la exposición al calor y al sol durante el verano o a un proceso fisiológico similar a la muda en los animales.
Christian Vendrell, director de los salones Identity Peluqueros, agrega que la respuesta del cuerpo a la luz solar disponible es un factor crucial. Durante el verano, la exposición al sol estimula la producción de vitamina D, favoreciendo el crecimiento capilar. Sin embargo, en otoño, con días más cortos y menos exposición solar, el ciclo de vida del cabello puede alterarse, provocando su caída.
La caída estacional es prácticamente inevitable y afecta tanto a hombres como mujeres en esta época del año. La clave reside en encontrar tratamientos que fortalezcan el cabello y eviten la interrupción de su fase de crecimiento, permitiendo la rápida sustitución de los cabellos perdidos.
Factores desencadenantes de la caída del cabello
- Ciclo capilar estacional: El cabello sigue un ciclo de crecimiento con fases de anágena (crecimiento), catágena (transición) y telógena (reposo). En otoño, es común que más folículos entren en la fase telógena, llevando a una caída natural del cabello en crecimiento.
- Cambios hormonales: Alteraciones hormonales relacionadas con el estrés, la dieta o factores ambientales influyen en la caída del cabello. La exposición reducida al sol en otoño puede afectar los niveles hormonales.
- Deficiencias nutricionales: La falta de nutrientes esenciales en la dieta debilita el cabello, provocando su caída. En otoño, es crucial prestar atención a la alimentación para asegurar la obtención de los nutrientes necesarios.
- Estrés: Un factor crucial en la pérdida capilar, el estrés, tiende a agravarse en otoño con el regreso a la rutina postvacacional. La preparación para la temporada festiva también contribuye a niveles más altos de estrés.
- Cambios ambientales: La exposición al viento frío y seco, así como la disminución de la humedad en el aire durante el otoño, vuelve el cabello más frágil y propenso a romperse.
- Microbiota intestinal: La disfunción de la microbiota intestinal, según el Dr. Javier Morán de VR6, puede estar vinculada a la caída del cabello. La investigación de VR6 destaca la relación entre la disbiosis y la alopecia, sugiriendo que ciertas bacterias consumen biotina en exceso, afectando su absorción y función beneficiosa.
La pérdida capilar en cejas y pestañas
Cuando hablamos de la caída en otoño, no solo nos referimos al cabello en la cabeza. Cejas y pestañas también sufren, siendo las primeras en debilitarse. La directora de RevitaLash Cosmetics España señala que durante el verano, la exposición al calor y al sol altera el ciclo natural de pestañas, deteniendo su crecimiento y causando su caída en otoño. Las bajas temperaturas en esta estación vuelven las pestañas más quebradizas y propensas a caer, especialmente si han sido expuestas a fijadores y maquillaje diario.
Tratamientos para combatir la caída del cabello
Los expertos concuerdan en que la caída del cabello requiere enfoques combinados. Algunos tratamientos recomendados son:
- Sérum anticaída de L’Occitane: Una fórmula que actúa en el ciclo de vida del cabello para limitar su caída, estimular el crecimiento, fortalecerlo y darle grosor. Contiene extractos de berro, genciana, regaliza y vitamina E.
- Probióticos anticaída de VR6: Desarrollados para abordar la disbiosis, estos probióticos ayudan a mejorar la microbiota intestinal, favoreciendo la absorción de biotina. Tomados como complemento alimenticio, se ha demostrado su eficacia en la reducción de la caída del cabello.
- Champú fortificante de Kevin Murphy: Plumping Wash es un champú espesante que evita la caída y proporciona grosor al cabello. Contiene extractos de raíz de jengibre y ortiga que fortalecen y redensifican el cabello.
- Tratamiento revitalizante de DS laboratories: Spectral.CSF es un tratamiento revitalizante y anticaída diseñado para mujeres preocupadas por la pérdida capilar. Estimula el crecimiento saludable del folículo piloso, proporcionando más cuerpo y volumen.
Abrazando soluciones para una melena saludable
En conclusión, la caída del cabello en otoño es un fenómeno común, pero enfrentarlo con soluciones adecuadas es clave. Combinar tratamientos como sérum anticaída, probióticos, champús fortificantes y tratamientos revitalizantes ofrece un enfoque integral.
Cada individuo es único, por lo que encontrar la combinación adecuada es esencial. No solo se trata de abordar la pérdida capilar estacional, sino también de prevenir la transición a problemas más serios como la alopecia. ¡Cuidemos nuestra melena y enfrentemos el otoño con confianza y estilo!
