Dos meses después de ganar el Mundial con la Selección de Fútbol, y de convertirse en la involuntaria protagonista de este hito para el deporte femenino por el beso no consentido que Luis Rubiales -ya expresidente de la Real Federación Española de Fúbtol- le propinó durante la celebración del título, Jennifer Hermoso vuelve a La Roja.
Tras su comentadísima ausencia en la última convocatoria -la nueva seleccionadora del combinado nacional, Montse Tomé, explicó que no la había llamado para «protegerla», desatando una nueva polémica que se sumaba a su denuncia por agresión sexual y coacciones a Rubiales- la jugadora del Pachuca mexicano vuelve y lo hace por todo lo alto.
Este domingo, 24 horas antes de incorporarse a la concentración y reencontrarse con sus compañeras en la ciudad del fútbol de Las Rozas, Jenni aterrizaba en Madrid procedente de Ciudad de México y, nada más llegar a nuestro país, daba un tranquilo paseo con su hermano Rafa -uno de sus grandes pilares- por el madrileño barrio de Carabanchel.
Sonriente y relajada, la futbolista ha evitado pronunciarse sobre su juicio con Rubiales, dejando en el aire el motivo por el que ha pedido un careo entre su amiga Ana Belén Ecube -que ya declaró ante el juez como testigo de la coacción que presuntamente sufrió Jenni para que negase públicamente que el ‘pico’ de la final del Mundial no había sido consentido- y el director de marketing de la RFEF, Rubén Rivera, investigado por estas posibles coacciones de las que fue víctima.
«Sabéis que no voy a decir nada, vais a estar ahí para nada porque no voy a decir nada» ha asegurado la futbolista antes de proseguir su paseo con su hermano, aprovechando para ponerse al día antes de incorporarse a la concentración de La Roja.
Una actitud idéntica a la que ha tenido esta mañana al abandonar su casa acompañada de su madre para dirigirse a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas antes de viajar a Italia para enfrentarse a la selección italiana el próximo viernes, primer partido de Jenni con la selección tras el polémico beso de Rubiales. Muy discreta, la delantera ha guardado silencio sobre cómo afronta su proceso judicial con el expresidente de la RFEF y ha dejado en el aire cómo se encuentra anímicamente por este tema.
Sin embargo, de lo más sonriente ha reconocido ante los micrófonos de Europa Press que está encantada con su vuelta al equipo: «Me siento bien, bien» ha confesado.
Además, Jenni se ha pronunciado sobre su presencia -junto al resto de sus compañeras de La Roja- en la lista Forbes de las 100 mujeres más poderosas e influyentes de nuestro país, asegurando que es «una alegría» y se sintió «muy bien» al enterarse de este reconocimiento que llega tras convertirse en campeonas del Mundo por primera vez.
