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La familia Biondo manda un comunicado anunciando que no participará más en el «circo» formado tras la docuserie

Justo cuando se cumple un mes del estreno en Netflix del documental sobre la muerte de Mario Biondo, ‘Las últimas horas de Mario Biondo’, la familia del italiano ha emitido un comunicado a través de sus abogados con el que deja clara su postura y anuncia que se van a mantener al margen de hacer cualquier declaración al respecto.

Hace unos días era Raquel Sánchez Silva quien rompía su silencio a través de un comunicado «desvinculándose absolutamente» de la docuserie… ahora Vosseler Abogados, como representante legal de la familia Biondo en España, anuncia que el mismo despacho «no alimentará más el circo que, en contra de la voluntad de la familia, se ha creado alrededor de la muerte de Mario Biondo».

Además, aseguran que «todas las acciones legales que se han realizado en la búsqueda de la verdad» sobre su muerte han provocado una expectación «morbosa e indeseable de la que algunos han intentado sacar provecho». Es por ese motivo por el que Vosseler Abogados «cierra filas a la espera de la resolución judicial en curso».

«En consecuencia, la familia Biondo no viajará a España para participar en una rueda de prensa en la que daría su opinión sobre la situación del caso y del documental de Netflix» exponen y aclaran que, a partir de ahora, solo realizarán comunicados «cuando considere que hay nueva información de interés y ésta no interfiera al recorrido judicial del caso».

Cabe recordar que el pasado mes de mayo, el despacho de abogados de la familia Biondo interpuso una denuncia exponiendo las contradicciones y falta de coherencia que hay entre las evidencias y certezas del caso y la tesis del suicido. Una denuncia que se sustenta en la resolución de agosto de 2022 del juez del Tribunal de Palermo Nicola Aiello, quien recoge en su escrito que «los elementos que se extraen del expediente del Ministerio Público sugieren que Mario Biondo fue asesinado por mano que permanece desconocida y posteriormente colocado en una posición apta para simular un suicidio».