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Patatas fritas: La receta de los chefs para un crujiente de ’10’

Cuando tenemos claro el asado que vamos a preparar, tanto si hemos elegido carne como si hemos optado por el pescado, en ocasiones nos falta decidir qué guarnición vamos a poner para acompañar nuestro plato. Por eso hoy queremos contaros cómo hacer patatas fritas o soufflé, la guarnición más elegante para menús especiales como unas deliciosas carrilleras de ternera en salsa. 

Las patatas suflé o soufflé son patatas infladas que resultan además de muy bonitas a la vista, muy ricas al comerlas ya que tienen un crujiente muy especial. Originarias de la cocina francesa del siglo XIX, siguen triunfando hoy en día gracias a la fama que han adquirido en algunos de los mejores restaurantes de nuestro país, como las ya míticas patatas soufflé de Zalacaín, que vemos en la imagen luciendo con toda su finura. Son perfectas para acompañar una paletilla de cordero, una lubina al horno o un pavo relleno.

Las patatas suflé o soufflé son patatas infladas que resultan además de muy bonitas a la vista, muy ricas al comerlas ya que tienen un crujiente muy especial. Originarias de la cocina francesa del siglo XIX, siguen triunfando hoy en día gracias a la fama que han adquirido en algunos de los mejores restaurantes de nuestro país, como las ya míticas patatas soufflé de Zalacaín, que vemos en la imagen luciendo con toda su finura. Son perfectas para acompañar una paletilla de cordero, una lubina al horno o un pavo relleno. 

Curiosamente, aunque pueden parecer muy difíciles y hacerlas nos hará quedar muy bien ante nuestra familia, su elaboración es bien sencilla si se respetan los tiempos y pasos tal como os voy a indicar a continuación.

Ingredientes

Patatas fritas

2 Patatas

Aceite de oliva virgen extra para freír

Sal al gusto

Elaboración de las patatas fritas

Patatas fritas: La receta de los chefs para un crujiente de '10'

Para hacer estas patatas suflé usaremos patatas viejas, que tendremos a temperatura ambiente. Para hacer la forma tradicional necesitamos hacer cuadraditos. Para elaborarlos, cuadramos la patata recortando la parte exterior redondeada y formamos un prisma rectangular. Los excesos y sobrantes los usaremos para hacer puré o para hacer una tortilla de patatas.

Con una mandolina, cortamos porciones a lo largo del rectángulo para obtener láminas de patata de unos 3 mm aproximadamente. Después cortamos las láminas en dos y ya tenemos los cuadraditos que se convertirán en nuestras patatas suflé. El siguiente paso es secar muy bien las patatas para eliminar el almidón que pueda haberse salido con los cortes

Mientras se secan entre dos papeles de cocina, ponemos dos sartenes al fuego, una a fuego vivo y otra a fuego lento. Freímos las patatas en la sartén con el aceite a fuego lento y las dejamos hacer hasta que se vean bien pochadas y blanditas. Mientras se fríen, les damos la vuelta ocasionalmente. Cuando estén listas, las sacamos en pequeños grupos y las metemos en la sartén donde tenemos el aceite muy caliente.

En unos segundos, veremos como se produce la magia y las patatas se inflan o suflan, formando pequeños rectángulos hinchados con la forma de un cojín o almohada. Los retiramos a papel absorbente y los comemos rápidamente. Como son una receta de guarnición, las patatas suflé o patatas soufflé van bien con cualquier plato principal. Lo más habitual es utilizarlas para acompañar un chuletón, un entrecot o cualquier pieza de carne que os guste, aunque también van muy bien con el pescado.

Todos los tipos de hacer patatas fritas

Imagen recurso patatas fritas

Comenzamos esta lista con uno de los tipos de patata frita más deliciosos que existen: las patatas rústicas. Estas patatas tienen forma de media luna y se caracterizan por su gran sabor, ya que suelen estar bastante condimentadas con aceite, ajo, sal , pimienta , paprika, curry o perejil. En fin, las opciones son infinitas pero su sabor es sencillamente inigualable. Y si las acompañas con una salsa del ajo o queso, mejor.

Como su nombre lo indica, las patatas fritas en cubos tienen forma de dados. Para obtener un mejor sabor y textura, es ideal que las patatas se pongan a freír en aceite caliente y luego dejarlas cocinando a fuego medio para que no se quemen por fuera y que se hagan bien por dentro. Las patatas en cubos están riquísimas por sí solas y sólo bastará que les agregas un toque de sal. Este tipo de patata frita se utiliza comúnmente para realizar la famosa tortilla de patatas.

 ¿Realmente las papas a la francesa vienen de Francia? Pues bien, la respuesta es que no. A pesar de su nombre, los orígenes de las «French fries» se remontan a Bélgica, donde los historiadores afirman que las patatas ya se freían a finales del siglo XVII, por aldeanos pobres que se veían obligados a reemplazar el pescado frito por otros alimento durante los meses de invierno cuando el río estaba congelado.

Sin embargo, sea cual sea su origen, las patatas fritas a la francesa están buenísimas. Para prepararlas, sencillamente pelamos y cortamos la patata en rectángulos algo alargados, luego las secamos con una toallas o papel de cocina, la pasamos por dos tandas de fritura para que se hinchen un poco y ¡voilà! a disfrutar.

Las patatas bravas son un aperitivo español por excelencia. Son patatas que se fríen en dados o trozos de cuartos y que se acompañan de una salsa brava o picante  (aunque no necesariamente tiene que picar). Esta salsa se prepara con caldo de carne, cebolla, ajo, harina común, pimentón dulce, sal, aceite y algún ingrediente picante como chile o cayena,  por ejemplo, aunque esta última es opcional.