Mar Saura recupera poco a poco la sonrisa tras una de las experiencias más duras de su vida. Su madre se contagió hace unos meses de Coronavirus y, después de haber pasado un infierno y de haber estado 34 días en la UCI debatiéndose entre la vida y la muerte – y casi 50 en total ingresada en un hospital, hace tres semanas recibía el alta. Un día que la modelo definió como «el más feliz de mi vida» aunque, por desgracia, todavía queda mucho para que su progenitora vuelva a ser la misma de siempre.
Así nos lo ha contado Mar en su reaparición en los ‘Elle Talks’, un evento organizado por la revista Elle para descubrir si somos positivos o debemos trabajar más el bienestar emocional con diferentes expertos y rostros conocidos de nuestro país, y en el que la presentadora enamoró una vez más con un elegantísimo vestido negro de Marni con falda de vuelo y un detalle en rosa y azulón en la cintura.
Confesando que es una persona «bastante positiva» en todos los aspectos, Mar nos ha contado cómo vivió la enfermedad de su madre: «Fue un gran susto, pobrecita. Mucho tiempo en el hospital, 48 días al final. Mucho tiempo en la UCI, muy complicado*». «Afortunadamente ahora ya está fuera, sigue siendo difícil por la recuperación porque sales muy malita, muy débil y entonces tienes que recuperarte, pero bueno, en eso estamos y ella está muy positiva y con muchas ganas, así que lo malo ya pasó«, ha añadido feliz porque, aunque lenta, su madre evoluciona bien que es lo importante y «la historia la puedo contar con una gran sonrisa, aunque durante todos esos días no fue fácil».
Pendiente de la salud de su progenitora, con quien tiene una relación muy especial, Mar todavía no sabe qué hará este verano, aunque intentará escaparse a Baleares porque «yo soy muy de Ibiza». «Vamos a ver qué tal, cómo sigue todo, y si realmente nos podremos ir de vacaciones, disfrutar un poquito y con más tranquilidad que el año pasado», apunta, deseando que «nos vacunen a todos para disfrutar con tranquilidad y con los tuyos de la mejor manera».
