Ayer saltaron todas las alarmas sobre un distanciamiento entre Tamara Falcó e Íñigo Onieva. El joven empresario habría sido visto en actitud cariñosa con otra chica, un acontecimiento que parecía haber hecho tambalear los cimientos de la relación que mantiene desde noviembre del año pasado con la marquesa de Griñón.
Fue Viva la vida el programa que compartió esta comprometida información, ante la estupefacción de Emma García. «Yo que creía que nos ibais a contar que van a casarse, y resulta que podría haber habido una infidelidad«, señaló la presentadora, Emma García.
Pero nada más lejos de la realidad. La pareja sigue tan bien avenida como siempre y han podido disfrutar de una divertida noche de bodas, previo desayuno -tan romántico como castizo- en el café de Gijón, que han zanjado a golpe de instántanea todos los rumores de crisis.
En los últimos meses Tamara Falcó ha sido señalada en varias ocasiones por saltarse las restricciones del estado de alarma, llegando a casa más tarde del toque de queda impuesto e incluso saliendo o entrando a zonas cerradas perimetralmente por la Comunidad de Madrid. Ahora, la socialité disfruta de la compañía de sus más allegados sin miedo a ser pillada.
