Tratando de retomar su rutina tras la reaparición mediática de Rocío Carrasco en la que acusa a Antonio David de ser un «maltratador» y haberle «arrebatado» a sus hijos hasta el punto de conseguir que éstos la odien, Rocío Flores asegura que «no tengo nada que decir». Una respuesta a las demoledoras palabras de su madre, que han provocado el fulminante despido de su padre de Mediaset cuando atravesaba por fin una etapa de tranquilidad laboral.
Aparentemente tranquila, y acompañada en todo momento por varias amigas que la están apoyando en estos complicadísimos momentos, Rocío ha reaparecido después de los dos primeros capítulos de la serie documental protagonizada por su madre, Rocío, la verdad para seguir viva, que la ha puesto nuevamente en el ojo del huracán, convirtiéndola en una de las grandes protagonistas de la actualidad.
Después de ‘denunciar’ en sus redes sociales que el pasado domingo intentó entrar por teléfono durante la emisión del programa para «intentar tender puentes una vez más» con su madre pero que ‘no’ la dejaron, Rocío ha decidido endulzarse la vida en estos complicadísimos momentos.
La nieta de Rocío Jurado, muy seria y sin perder la calma, ha acudido a una heladería malagueña con amigas y sin querer confirmar si dará su versión después del despido de su padre y de las durísimas confesiones de su madre. «No tengo nada que decir gracias», ha confesado. Lo cierto es que desde el minuto uno que salió a la luz el documental sobre Rocío Carrasco sabíamos que podría patas arriba la vida de muchas caras conocidas. Sino que se lo digan a Antonio David Flores, que no solo ha perdido su puesto en Telecinco sino también el respeto de muchos de sus ahora ex compañeros.