Parece que el matrimonio de Kiko Matamoros y Makoke ha acabado pero sus problemas legales no. Tal y como publica la revista Lecturas, el exmatrimonio se enfrentará en los próximos días a una nueva batalla judicial que podría acabar con ambos en prisión. Y es que Hacienda les reclama 1.2 millones de euros, una deuda que el colaborador derivó a la exmodelo, ya que la famosa casa de La Finquilla que en su día fue el nido de amor de la pareja está a nombre de ella a pesar de que fuese él quien pagase la hipoteca.
Ahora, el fisco acusa a Kiko de presunto delito de insolvencia punible y a Makoke de cooperadora necesaria para la comisión del delito, por lo que el colaborador se podría enfrentar a una pena de 6 años de cárcel mientras la malagueña lo haría a una de 2 años, lo que podría acabar con la entrada de ambos en prisión.
Sin embargo, ajena a este duro varapalo, Makoke continúa con su rutina diaria y, después de sus exigentes entrenamientos físicos, ha acudido a su peluquería de confianza a ponerse guapa. Muy tranquila, la colaboradora de Viva la vida insiste en que «no voy a decir nada» y «no voy a hacer ninguna declaración» ante las preguntas sobre sus nuevos problemas legales.
Muy discreta, la madre de Javier Tudela tampoco se pronuncia sobre su denuncia por amenazas y vejaciones a Kiko Matamoros, una noticia que recrudece más (todavía) la batalla sin cuartel que libra contra su exmarido desde su separación.
Sin embargo, Makoke rompe su silencio para volver a desmentir que organice fiestas ilegales en su domicilio y, tajante, responde a la vecina que la ha acusado de incumplir la ley en su chalet de La Finca. «Eso está donde tiene que estar. Se han dicho muchas mentiras y ahí si que te digo que todo eso está donde tiene que estar y es absolutamente falso. Se van a tomar todas las medidas. esa vecina tiene problemas con toda la comunidad», asegura. Lo cierto es que a pesar de que no lo muestren, no se encuentran en su mejor momento y este nuevo contratimepo legal podría acarrearles muchos problemas.
