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Beatriz Trapote habla sobre el estado de salud de Carmen Bazán tras su operación de cadera

En la recta final del embarazo y deseosa por conocer a su tercer hijo, una niña a la que llamarán Brenda, Beatriz Trapote sigue tan activa como siempre. De más de 40 semanas, y con una abultada barriguita que indica que el parto es inminente, la comunicadora apura estos días y, camino de su última revisión médica, confiesa cómo lleva la recta final de su gestación. Muy unida a su familia política, la mujer de Víctor Janeiro nos ha contado cómo se encuentra Carmen Bazán tras las informaciones sobre su estado de salud y la operación de cadera a la que fue sometida recientemente.

Beatriz Trapote

–  ¿Cómo estás?

– «Ya toca. Le gusta mucho la barriga, pero ya toca. De 40 más 4, voy al ginecólogo ahora a ver qué me dice.»

Igual le da por venir.

– «Mañana es el cumpleaños de su tía, las dos el 10 de marzo.»

Estás estupenda, haciendo deporte, súper activa, con los negocios, sin parar.

– «Es que no paro, pero también he dicho que dedico mi tiempo, mi fin de semana de relax… durante la semana hay que trabajar, hay que seguir. Pero bueno, me encuentro mal, me pongo a andar, a subir y bajar escaleras y me empiezo a encontrar con contracciones pero luego parece que corta, la cuestión es eso, enganchar las contracciones y que termine.»

Tendrás a toda la familia en vilo.

– «Jesús acaba de llamar ahora, esto qué es, esto qué es, cuando va a nacer ya, esto parece el parto de la burra y digo no me agobiéis… pero bueno hasta la semana 42, todos llamándome…»

¿Tu suegra cómo está?

– «Bien, recuperándose, encantada de que venga la nieta y venirse aquí unos días.»

Ella tenía pensado venir a ayudarte y tuvo la mala suerte de caerse.

– «Ella es fuerte, recuperándose a tope, ella está muy bien, con la llegada de su nueva nieta, ya la novena, Dios mío.»

Que esta nieta le sirva para salir de lo que está pasando.

– «Como todos, estamos pasando una época complicada, pero Carmen es muy fuerte y sus nietos le están dando esta motivación. Tuvo los niños de Jesús que los disfrutó en su momento, pero ahora ya son adolescentes. Ahora les toca los de Humberto y los de Víctor y luego vendrán otros.»

Dicen que se ha quedado sin casa, pero casa y nietos no le van a faltar.

– «Exactamente. Hasta luego».