Lourdes Montes ha conseguido labrarse un nombre lejos de ser la mujer de Francisco Rivera aunque muchos los crean. La popular diseñadora ha sabido entrar en una familia, en una saga que siempre está en el ojo del huracán. Se ha ganado no solo el calor del hijo de Paquirri y Carmina Ordóñez, sino también de la prensa que le adora.
Esta andaluza de ojos penetrantes e intensos supo conquistar a uno de los toreros más deseados y estar en un discreto segundo plano. Hoy queremos que conozcas a esta mujer emprendedora y empresaria. En Cotilleo.es hemos hablado con ella en una entrevista que no vamos a catalogar de exclusiva porque es un término que no le gusta ni a ella ni a su marido. Y es que, para el público más desconocido, muchas veces el leer palabra EXCLUSIVA, cree que viene implícito un cobro por una entrevista, pero ni mucho menos. Exclusiva es algo novedoso, que en ese momento nadie tiene.
Lourdes Montes -37 años- ha abierto la puertas ‘de su casa’ y de su corazón. Su trabajo, su relación con su marido, su defectos y virtudes, así como la relación con Eugenia, son algunas de las cosas que nos ha contado. Incluso su comentada relación con su cuñada Eva González. Su franqueza y naturalidad son un plus que le definen como persona. Además, la andaluza nos cuenta cómo aprender de sus éxitos y de sus fracasos han sabido marcarle el camino de donde está ahora. Su esposo Francisco Rivera has sido el primero en animarle en sus proyectos y aventuras. Y eso es algo impagable.
Lourdes Montes, una empresaria preocupada por un sector muy importante en el mundo de la moda
> Mientras el diestro está centrado en su labor como empresario poniendo en contacto a personas de distintos sectores, Lourdes Montes sigue al frente de su negocio como diseñadora de trajes de flamenca. «Fran está haciendo muchas cosas porque como es una persona tan inquieta… Está colaborando con una empresa americana. No para. Y como está muy bien relacionado con muchos sectores empresariales, va poniéndoles en contacto como un relaciones públicas. Eso les interesa a las empresas».
Con el tiempo, su socia y ella se han reinventado y han dado el color que todo hogar necesita. Tras Mi Abril, la colección de los vestidos de flamenca que han lucido personalidades como Victoria Federica de Marichalar y Borbón y Agatha Ruiz de la Prada, llegó la colección Mi Abril Textil, un proyecto muy valiente y que agota existencias. La mujer de Francisco Rivera seguía la estela de su abuela la cual había tenido un taller de costura con muchas personas a su cargo.
Lourdes es mucho de telas y tanto para mantelerías como para los trajes de flamenca -que se han quedado relegados hasta que pase la pandemia- le gustan que sean telas de calidad con gusto: «¿Tú sabes la cantidad de gente que vive de la confección de trajes de flamenca? Esto hace que muchas puedan incluso cerrar. Todo volverá. El traje de flamenca está muy vivo», comenta preocupada por el sector.
En cuanto a la colección de hogar están muy centradas en que se confeccione en la zona. «Nosotras elaboramos un boceto y luego lo plasmamos». Los colores de sus colecciones recuerdan incluso a Carmina Ordóñez o a Eugenia Martínez de Irujo, algo en lo que ella no había ni recaído.
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