El pasado lunes, después de presidir un acto, el Rey Felipe era informado de que una persona con la que había tenido un contacto directo el día anterior – se apunta a su íntimo amigo Álvaro Fuster – había dado positivo en Coronavirus. Esa misma tarde el monarca comenzaba una cuarentena de diez días por precaución ante un posible contagio de Covid-19.
Pese a que el pasado viernes Don Felipe se hizo una prueba PCR cuyo resultado fue negativo, continuó con su aislamiento en el Palacio de la Zazruela, presidiendo de modo telématico la inauguración del Foro Regional de la Unión por el Mediterráneo, celebrado en Barcelona ese mismo día.
Doña Letizia, en ausencia de su marido, ha protagonizado la agenda real en solitario durante estos días y se ha desplazado a Sevilla y a Valencia para presidir diferentes actos. Pero, según acaba de anunciar el Departamento de Comunicación de la Casa de S.M. El Rey, el confinamiento de Don Felipe ha concluido y el monarca vuelve al trabajo, presencialmente hablando.
El Rey reaparecerá el próximo jueves presidiendo, en el Palacio Real del Pardo de Madrid, la reunión del Patronato de la Fundación Carolina. Un acto que, aunque en principio no estaba previsto en la agenda real, significará el regreso del Jefe del Estado después de diez días – ni uno más ni uno menos – de forzosa ausencia por parte de un Don Felipe que, tras su negativo en la prueba del Covid-19, está en plena forma y deseando volver al trabajo.
