Todo parecĂa indicar que la sintonĂa entre la infanta Cristina y Letizia Ortiz iba a ser excelente. La mediana de los reyes emĂ©ritos pasaba por ser una mujer de su tiempo y nada apegada al clasismo. Sin embargo, una serie de movimientos dejaron al descubierto su verdadera cara. Desde entonces, Cristina y doña Letizia mantienen una lucha sin cuartel. Muchos han sido los damnificados. Sin embargo, entre ellos, resulta uno a quien puede calificarse de vĂctima inocente. Te lo contamos todo a continuaciĂłn.
2El Ăłrdago del prĂncipe
Por más que don Felipe explique una versiĂłn edulcorada sobre cĂłmo acogieron sus padres a Letizia, la realidad es que tuvo que lanzar un Ăłrdago para conseguir que la aceptaran. Sin decir cuál era su destino, el prĂncipe abandonĂł Zarzuela y se trasladĂł a Nueva York, donde se encontraba la periodista por cuestiones de trabajo. AllĂ vivieron unas noches de pasiĂłn en las que se prometieron no separarse jamás. Don Juan Carlos estaba cada vez más nervioso. Confiaba en que el prĂncipe cumplirĂa con su obligaciĂłn y estarĂa presente en el desfile de las fuerzas armadas que se celebra el 12 de octubre.
Cuando el rey emĂ©rito comprobĂł que su hijo habĂa incumplido una de sus obligaciones más sagradas, empezĂł a preocuparse seriamente. Hasta entonces, habĂa creĂdo que serĂa fácil conseguir que renunciara a Letizia como antes hizo con Eva Sannum. Sin embargo, cuando el prĂncipe regresĂł a Zarzuela, ocurriĂł lo inesperado, que amenazĂł con renunciar a sus derechos en caso de que su padres se opusiera a la boda. Fue entonces cuando don Juan Carlos comprendiĂł que habĂa perdido la partida y que no le quedaba otra que dar su bendiciĂłn al enlace.