La infanta Cristina se equivocó, apostó todo al rojo y salió negro. Desde entonces, está apartada de la familia real. Ante sí, un panorama desolador. Su marido en prisión y ella muy tocada a nivel psicológico. Por si lo anterior no fuera suficiente, ha sufrido una grave humillación pública que ha sido la puntilla para una mujer que tuvo el mundo a sus pies y salió por la puerta de atrás de Zarzuela.
La hija de los reyes eméritos se ha quedado sola. Hasta su madre se ha distanciado de ella a petición de don Felipe. Doña Letizia no quiere ni escuchar su nombre, no le perdona los desaires del pasado. Tan solo le queda la mano amiga de su hermana Elena y la lealtad inquebrantable de los Urdangarín.
4Adiós al título de duquesa de la infanta Cristina
En junio de 2015, el rey Felipe VI tomó la decisión de revocar el uso del título de duquesa de Palma a su hermana la infanta Cristina. ¿El motivo? La negativa de la hija menor de los ahora reyes eméritos de renunciar a sus derechos de sucesión al trono de España tras haberse visto involucrada en el caso Nóos. Una petición que en su momento le hizo el rey Juan Carlos I y, después, don Felipe.
La Casa del Rey emitió pues un comunicado anunciando la publicación en el Boletín Oficial del Estado de un real decreto por el cual don Felipe revocaba a su hermana la posibilidad de usar el título de duquesa de Palma. Un título el cual le fue otorgado a doña Cristina por su padre, Juan Carlos I, en 1997, cuando contrajo matrimonio con Iñaki Urdangarín. Con esta decisión, Felipe VI constató una vez más el distanciamiento que mantenía con su hermana desde que se iniciara la imputación de ésta en el caso Nóos por los negocios de Iñaki Urdangarín, lo cual hizo que la imagen de la Corona se viera ensuciada ante la opinión pública.