De nuevo, un jueves más, tocaba asistir a una gala de ‘Supervivientes 2018’. Este era el segundo jueves que se tenía que enfrentar al público, después de haber conseguido cosechar muy buenos resultados a la audiencia.
Con el concurso ya en movimiento, los robinsones tenían que haber superado la primera semana, en la que se tienen que asentar en su nuevo hábitat, y parece que no todos lo habían logrado de la misma manera. La noche del jueves les esperaba el que iba a ser el primer intento de abandono del concurso, la que sería la primera expulsada del reality y un intercambio de equipos.
2El juego de localización, boicoteado por Saray Montoya
Para decidir que equipo habitaría en qué localización, decidieron utilizar un juego tradicional ya en ‘Supervivientes’. El boxeo sobre una plataforma en el agua, en el que dos participantes, uno de cada equipo, debía echar a su contrincante. El objetivo, tirarlo al agua. Una prueba bastante sencilla que, de repente, sufrió un contratiempo que nadie podía esperar.
Los dos equipos estaban empatados, cuando Saray Montoya se negaba a participar. Ella alegaba que le dolía la espalda, aunque el médico le había dicho que estaba en perfectas condiciones para poder participar. Ante esta situación, con el abandono de Saray Montoya, el punto iba a parar para el equipo que habitó la anterior semana en el lado civilizado, por lo que Mayte Zaldívar, la siguiente en participar, decidía tirar la toalla y dar por perdido el juego. Sin embargo, tras una pequeña reflexión, finalmente decidía participar, aunque perdió el juego finalmente.
