comscore

Nerviosismo en Casa Real por la última decisión de los jueces del caso Urdangarin

Si ha existido un verdadero golpe bajo, un mazazo absoluto a los cimientos de Casa Real en los últimos tiempos, ese es, sin lugar a dudas, el caso Nóos. Por primera vez en la historia de la democracia, y su correspondiente monarquía parlamentaria, un miembro del núcleo interno de la Familia Real se veía envuelto en un entramado de corrupción.

El recurso y su situación personal fuera de Casa Real

Casa Real

A principios del pasado mes de julio, la Fiscalía del Tribunal Supremo solicitaba el incremento de la pena para Iñaki Urdangarin de seis años y tres meses a diez años de prisión. En un escrito emitido por el ministerio público se manifestó que «Ignacio Urdangarín deberá ser condenado como autor de un delito continuado de prevaricación en concurso medial con un delito continuado de falsedad en documento público, así como de malversación, aplicando el artículo 65.3, al no ser funcionario público y la atenuante simple de reparación del daño». 

Recordemos que en un principio, la Fiscalía Anticorrupción con Pedro Horrach al frente solicitaba diecinueve años y medio de prisión para el marido de la infanta. Tras el dictamen de la sentencia condenatoria, Mario Pascual Vives, abogado de Urdangarin, presentó un recurso de apelación ante el Supremo el pasado 1 de agosto argumentando, en palabras del propio yerno del rey que él simplemente se limitó a ser un «amigable componedor», un «mediador sin conocimientos en Derecho Administrativo».