Bárbara Rey es uno de esos personajes famosos, digamos, «de aquellos de toda la vida». María García, de Totana, fue una de aquellas famosas que decidieron dejar de llamarse por su nombre de pila para ser conocida por su nombre artístico: de Antonia a Sara, de Purificación a Norma y de María a Bárbara. ¡Qué bárbaro!
Su matrimonio con el domador Ángel Cristo siempre estuvo rodeado de polémica. La vida del circo, entre carpas, animales, látigos y las adicciones de su ex pareja, hicieron que Bárbara un día diese el salto mortal de los shows circenses a los platós de televisión y las revistas del colorín. Ahí vimos nacer a la estrella que es hoy. Su vida, insistimos, ha tenido más sombras que luces, y hoy haremos un repaso por todas ellas…
En esta historia, como pueden imaginar, hay un sinfín de personas implicadas: Bárbara, sus íntimos, el Rey, la corte y su equipo y por supuesto, la prensa, que nunca se atrevió a destapar nada de esta historia porque para qué engañarnos, don Juan Carlos era el jefe del Estado.
Bárbara declaró que llegó a temer por su vida, y en esta línea de personas implicadas y testigos, Sálvame Deluxecebó la figura de alguien clave en este entramado. Un testigo directo que no es otro que Jenny Llada, vecina de Bárbara Rey en la localidad madrileña de Somosaguas y responsable del chivatazo a la policía cuando observó con sus propios ojos que alguien entraba por el jardín deBárbara para ejecutar el famoso robo de la comprometida documentación que la de Totana tenía en su finca.
