Laura Fa ya dio muestras antes de enrolarse en la Sálvame Snow Week que iba directa a conseguir su meta, aunque para ello tuviera que llevarse por delante a quien fuera. Empezó calentando motores atizándole a Terelu Campos, de quien dijo no se merecía la silla que ocupaba en el programa vespertino que produce La fábrica de la tele. A Mila Ximénez la acusó de jugar sucio como compañera. Tampoco se quedó corta con Belen Esteban, sobre quien expresó que su tiempo pasó. Y ya, rozando el ridículo, la periodista comentó que deseaba que Kiko Hernández se fuera porque así había una silla más en juego. Si eres fan de Laura Fa, dejarás de serlo cuando leas nuestras diez razones para odiarla. Advertimos: no apto para cardiacos.
Laura Fa deja mucho que desear como compañera al hacer uso de una confidencia que Belén Esteban le hizo esta semana en maquillaje. La rubia le expresó a la recién llegada que su hija tenía novio y que se veían poco porque el chico reside en Birmingham. Por si lo anterior no dejara a la periodista en muy mal lugar, ha rematado la jugada ventilando que la copresentadora de Sálvame no se lava las manos tras hacer sus necesidades, dado que fueron juntas al lavabo y así lo corroboró.
Como decíamos al principio, no nos mola nada que Fa vaya a Sálvame en plan espía. Y lo que es peor, que la información que obtiene la lance en otro programa donde colabora: Fricandó matiner, de RAC105. Desde aquí, vaya toda nuestra solidaridad con Belén y Andrea Janeiro. Y, ya saben, si Laura Fa está delante, no abran la boca, so pena de que sus palabras sean retransmitidas en la radio.

Terelu Campos gustará más o menos pero no es de recibo lo que sobre ella dijo Laura Fa: “No se merece una silla en Sálvame. Su papel en el programa es muy limitado. No entra en los juegos, informa poco… La veo prescindible”. La verdad es que Terelu ha hecho un gran esfuerzo por aclimatarse a Sálvame, un formato de televisión muy diferente a otros en los que ha participado. En cuanto se trata de alguna información relativa a ella, la presentadora no se niega a explicar y aclarar cuantas dudas tengan sus compañeros. Sin duda, Laura Fa ha patinado, y mucho. Ya hay que tener caradura para decir que otros no aportan. ¿Y qué pasa con ella? Pues no destaca por sus grandes exclusivas. Sus contribuciones, mayoritariamente, se basan en la opinión, como una recogevídeos más.
Se nota que Laura Fa tenía ganas de dar el salto a Telecinco. De ahí que haya aterrizado como un elefante en una cacharrería, lo que la deja en un muy mal lugar ya que se percibe que está dispuesta a lo que sea para seguir en Sálvame. Sin embargo, como no lleve información, lo tiene claro. El equipo de colaboradores habituales está muy consolidado y están representados todos los perfiles. Por tanto, sobra opinión, ni que sea tan ácida como la que ofrece la periodista. Y atención a su manera de desmentir informaciones ajenas, porque ahí también es de lo más hiriente. Así que, cuidado, porque tanto colaboradores como personajes salen escaldados si Fa se los lleva a la boca.

Los looks de Laura Fa no nos gustan nada. Bien podría arreglarse un poco más para lucir mejor en pantalla. La verdad es que cansa verla siempre con ese estilo casual de jeans, bambas y chándal. Estaría mejor si innovara un poco más en cuanto a outfits. También debería arriesgar con el maquillaje. Tanta moderación le resta. Por no hablar del pelo, lleva el mismo peinado hace años. ¿Acaso adora el vintage? Por favor, Laura, hazte un cambio de imagen, te quedará genial y todos te lo agradeceremos. Cansa verte siempre igual. Y es que es lo mismo en todos los programas donde colabora. Hay que innovar, bonita. Rogamos encarecidamente a los estilistas de Cámbiame que la acojan en su seno.

No damos crédito ante las indiscreciones de Laura Fa. Y pensando, pensando, hemos recordado aquella tarde que explicó en la Sálvame Snow Week que Kiko Matamoros había hecho un montaje con una chica en los días en que estaba alejado de Makoke. Según explicó entonces, lo sabía a ciencia cierta porque ella fue la periodista encargada de ejecutarlo. Totalmente lógico que Kiko se cabreara. Y diez puntos para él por recordarle que si estaba mal que él participara en un montaje, ni te cuento lo que representaba para ella, a nivel profesional, el formar parte del mismo. Más razón que un santo. Menuda mancha resultan en el curriculum de un periodista los montajes. ¡Las hay con cara!

Laurita tiene la fea costumbre de mirar por encima del hombro a los que no son periodistas y ejercen como colaboradores. De hecho, alguna vez ha dejado claro su parecer en directo. Alfonso Arús tuvo que recriminarle su puritanismo al intentar hacer de menos a Ares Teixidó por no haber ido a la universidad y trabajar en los medios. Y es que así es ella, ácida, punzante e incisiva, de las que se lleva todo por delante cuando le apetece.
Por cierto, que nos entra risa cuando afirma que tiene mucha credibilidad porque dice lo que siente. Lo que nos faltaba, una kamikaze ha llegado a la ciudad. Y así se llama el arte que ella practica, Sincericidio, que significa: “Manifestar a otra persona lo que se cree de ella sin ningún tacto, de forma ofensiva e insultante, creyéndose en posesión de la verdad absoluta y pensando que la franqueza completa es imprescindible y la sinceridad está por encima de todo”.







