
Belén Esteban es la protagonista indiscutible de la semana. Todas las miradas se posan en ella después de que una asociación decidiera premiar a Jesulín de Ubrique en pro de la igualdad entre mujeres y hombres. Un reconocimiento que muchos han puesto en cuestión debido a la poca relación que el torero ha tenido con su hija Andrea, que en pocos meses cumplirá la mayoría de edad. Belén asegura que vive una irrealidad, pues si por algo se ha caracterizado su ex es por no atender a su hija.
Tanto es así que en público se jacta de haber proporcionado todo tipo de facilidades para que viera a su hija Andrea. Asegura, con los ojos cerrados y la mano en el corazón, que Jesús Janeiro ha rechazado todas las oportunidades para reencontrarse con su hija. Que, en efecto, la adolescente no es víctima de la alienación parental. Pero hubo un tiempo en que Belén mantenía lo contrario. Reiteraba que no quería que el padre de su hija tuviera contacto con ella. Fue en Tómbola el 13 de julio de 2000 cuando Andrea tenía once meses.

Pero no solo eso. La periodista Lydia Lozano, que por aquel entonces ofrecía información rotunda sobre las contradicciones de la ahora colaboradora de Sálvame, le preguntaba por un viaje a Cancún que decidió no realizar «porque llamaste al abogado y le dijiste que, antes de que Jesús se quedara con tu hija, no te ibas de viaje». Belén, acorralada por las preguntas contundentes, respondía con evidente nerviosismo: «Bueno, yo he dicho que hasta que no se solucione todo, no se la va a llevar».
Durante la misma entrevista, Belén confesó estar recibiendo amenazas de muerte. Aseguró que alguien le telefoneba con asiduidad para decirle que seguían todos sus pasos: «Me llaman y me dicen que he estado en un sitio, que he estado con estas personas y la verdad es que estoy asustada». Con evidentes signos de incomodidad, la Esteban pidió, a quien le quisera escuchar que, en caso de sucederle algo: «Mi hija se quede con mis padres que es con quien tiene que estar la niña. Si a mis padres le quitan la niña les da algo».

Referente al pago de la manutención, Belén Esteban mantuvo en varios programas de televisión que Jesulín no le pasaba la manutención de su hija. Lo hizo en Tómbola, en Como la vida de Antena3 entre otros espacios: «Le ha mandado dos o tres talones en seis meses. Pero tanto dijo Belén que el padre de su hija no se preocupaba por la situación económica de su hija, Jesulín tuvo que dar unas declaraciones a la revista Qué Me Dices negando lo explicado por la colaboradora: «Es falso que yo me pasara un año sin pasarle la manutención a mi hija».

